El
secretario del Tesoro de Estados Unidos, Timothy Geithner, abogó hoy por una
reestructuración del sistema regulador del sector financiero que incluya una
nueva agencia, pero el presidente de la Reserva Federal,
Ben Bernanke, argumentó que ésa puede ser función de su agencia.
Los altos cargos comparecieron hoy ante el Comité de Servicios
Financieros de la Cámara
de Representantes, que estudia los mecanismos para consolidar y fortalecer la
supervisión gubernamental de los mercados financieros, repartida ahora entre
distintas agencias con responsabilidades redundantes.
Geithner
dejó claro que tras el casi colapso del sistema financiero del año pasado el Gobierno
del presidente Barack Obama tiene un mandato de los votantes para que haya
"cambios rápidos en un sistema regulador anticuado e ineficaz".
Sin
embargo, la lucha entre las distintas agencias que actualmente tienen
responsabilidades en esta materia por mantener su territorio dejó en claro que
la tarea no será fácil para los legisladores.
"No
podemos darnos el lujo de dejar que persistan las vulnerabilidades que
sembrarán la semilla de crisis futuras", dijo Geithner, quien promovió
enérgicamente la idea del Gobierno de Obama de fusionar la Contraloría de la Moneda y la Oficina de Supervisión de
Bancos de Ahorro en una nueva "Oficina Nacional Supervisora de
Bancos".
Lo mismo
dijeron los representantes de algunas de las agencias reguladoras como la Corporación Federal
de Seguro de Depósitos y la
Contraloría de la
Moneda, y aún la Reserva Federal.
Bernanke
defendió el papel de la
Reserva y señaló que la ampliación de su vertiente
supervisora "sería una extensión natural" del papel del banco central
para encarar las amenazas a la estabilidad del sistema financiero.
En lugar de
transferir parte de las atribuciones de la Reserva a la nueva agencia propuesta, dijo
Bernanke, "debería darse (al banco central) un enfoque que tome en cuenta
la seguridad y solidez del sistema financiero, como un todo, como asimismo la
de las instituciones individuales".