La economía canadiense corre el
riesgo de perder hasta 582.000 puestos de trabajo, si los tres
grandes fabricantes de automóviles estadounidenses (General Motors,
Ford y Chrysler) cesaran sus actividades, según un informe dado a
conocer hoy.
El informe "El impacto económico en Canadá de los tres
fabricantes de autos de Detroit" ha sido realizado por el Ministerio
de Desarrollo Económico y Comercio de la provincia de Ontario, donde
se concentra la industria automovilística canadiense.
El estudio plantea dos escenarios. Uno, en el que los "Tres
grandes de Detroit" cesan de forma completa sus actividades y el
segundo en el que los fabricantes reducen un 50% su
producción y empleo.
"Las consecuencias económicas tanto del cese total como parcial
de las actividades de los Tres Grandes (de Detroit) son crudas.
Ambos escenarios son suficientes para sumir a Ontario en una
profunda recesión mientras que el país escapa por los pelos en el
escenario de una reducción del 50%", señaló el informe.
En el caso de un cese parcial de sus actividades, las pérdidas
laborales en Canadá serían de 157.000 puestos de trabajo en el 2009
(141.100 en Ontario) y 296.000 (269.000 en Ontario) en el periodo
2010-2014.
En el peor escenario, las pérdidas serían de 323.100 puestos en
el 2009 y 582.000 en el periodo 2010-2014.
"Las pérdidas laborales siguen acumulándose tras el primer año
porque la debilidad económica reduce la inversión, desanima la
inmigración y frena la construcción de nuevas viviendas creando una
espiral económica negativa", explicó el estudio.
Aún así, el estudio dice que los números son "conservadores
porque ignoran cualquier impacto negativo en las exportaciones
(excepto las del sector de componentes del automóvil) por la
debilidad de la demanda en Estados Unidos y el extranjero producida
por la caída de los Tres grandes (de Detroit)".
La desaparición total de los tres fabricantes de automóviles se
traduciría en la reducción del 80% de la producción del
sector de componentes del automóvil a pesar de que se mantenga la
producción de los fabricantes japoneses instalados en el país.
La reducción de un 50% de la producción de los "Tres
grandes de Detroit" significaría la reducción de un 45% de
la producción de los fabricantes canadienses de componentes.
El informe coincide con las declaraciones del primer ministro
canadiense, Stephen Harper, quien afirmó a la cadena de televisión
CTV que está "muy preocupado con la economía canadiense".
Hace dos meses, en plena campaña electoral, Harper afirmó que la
economía canadiense se encontraba en buena posición y que no estaba
preocupado por una posible recesión.
Pero en sus declaraciones a CTV Harper dijo que una depresión es
incluso posible.