La Cumbre de América Latina y el Caribe
que ha convocado Brasil para la semana próxima congregará al menos a
29 jefes de Estado y de Gobierno de los 33 países invitados, según
informaron hoy fuentes oficiales brasileñas.
El jefe de la División de Integración Económica del Ministerio de
Relaciones Exteriores, Paulo Roberto França, dijo en rueda de prensa
que sólo falta por confirmar la presencia de jefes de Estado y de
Gobierno de tres países, que no identificó pues se cree que habrá
"asistencia total".
La cumbre, que Brasil define como la primera oportunidad que los
líderes de ambas regiones tendrán para conversar "sin tutelas", se
celebrará entre el martes y el miércoles de la semana próxima en
Costa de Sauipe, un balneario situado a unos 100 kilómetros de la
ciudad de Salvador, en el estado de Bahía.
Para esta cumbre Brasil ha convocado a los líderes de Antigua y
Barbuda, Argentina, Bahamas, Barbados, Belice, Bolivia, Chile,
Colombia, Costa Rica, Cuba, Dominica, Ecuador, El Salvador, Granada,
Guatemala, Guayana, Haití, Honduras, Jamaica, México y Nicaragua.
La lista de 33 países la completan Panamá, Paraguay, Perú,
República Dominicana, Surinam, Santa Lucía, San Cristóbal y Nevis,
Sao Vicente y las Granadinas, Trinidad y Tobago, Uruguay y
Venezuela.
França insistió en que esta cumbre "no será ni pretende ser un
contrapunto a nada", en alusión a quienes la consideran una especie
de reunión de las Américas sin Estados Unidos o una Iberoamericana
sin España y Portugal.
"Esta cumbre tiene una agenda positiva y propone que los líderes
de América Latina y el Caribe se sienten por primera vez a la misma
mesa para debatir con perspectivas y agendas propias", indicó el
funcionario, quien insistió en que "el tema no es que falte alguien,
sino que ambas regiones estén juntas".
Sobre la mesa estarán asuntos puntuales de la actualidad mundial,
como las crisis financiera, alimentaria, energética y ambiental, así
como otros relativos a la integración y el desarrollo, que serán el
eje central de la cumbre, señaló França.
La cumbre concluirá con una declaración conjunta que comenzó a
ser negociada el mes pasado en Zacatecas (México) y será firmada por
los jefes de Estado y de Gobierno, que también participarán en un
debate en el que tendrán entera libertad para plantear los asuntos
que les interesen.
França explicó que aún no se ha definido si esta cumbre tendrá o
no continuidad o si se convertirá en un mecanismo permanente.
"Eso será decidido en la propia cumbre", dijo el funcionario,
aunque aclaró que sí se ha establecido que lo debatido en Costa de
Sauipe deberá tener "algún tipo de seguimiento".