Microsoft anunció que el crecimiento en su unidad de computación en la nube se desaceleró durante los últimos tres meses de 2024, un revés para un negocio que ha apostado miles de millones en productos de Inteligencia Artificial.
El negocio de computación en la nube Azure reportó un aumento de ingresos de 31%, frente al 34% del trimestre anterior, según indicó la empresa en un comunicado el miércoles. Los analistas habían proyectado un incremento del 32%.
Los ingresos totales en los tres meses finalizados el 31 de diciembre aumentaron 12%, alcanzando los US$ 69.600 millones. Las ganancias durante el trimestre, el segundo del año fiscal de Microsoft, fueron de US$ 3,23 por acción. Los analistas estimaban ventas de US$ 68.900 millones y ganancias de US$ 3,12 por acción, según datos de Bloomberg.
El fabricante de software es considerado un líder en la comercialización de productos de IA, gracias a su estrecha asociación con OpenAI, creador de ChatGPT. En el último año, Microsoft ha lanzado una avalancha de asistentes de IA bajo la marca Copilot, pero los esfuerzos para monetizar esos productos están llevando más tiempo de lo que algunos inversionistas preferirían.
Junto con sus rivales en el sector de la nube, Google y Amazon, Microsoft está gastando más que nunca en su historia, desembolsos que se destinan principalmente a los chips y centros de datos necesarios para alimentar los servicios de inteligencia artificial que consumen mucha energía. La empresa ha dicho que espera gastar US$ 80 mil millones este año fiscal en centros de datos de inteligencia artificial.
Los gastos de capital durante el trimestre fueron de US$ 22.300 millones, dijo la compañía, superando las expectativas de los analistas de aproximadamente US$ 21 mil millones de dólares.
Los ingresos totales en los tres meses que terminaron el 31 de diciembre aumentaron un 12% hasta los US$ 69.600 millones de dólares. El beneficio durante el trimestre, el segundo del año fiscal de Microsoft, fue de US$ 3,23 dólares por acción. Los analistas estimaron unas ventas de US$68.900 millones de dólares y un beneficio de US$ 3,12 dólares por acción, según datos compilados por Bloomberg.
Wall Street ha comenzado a cuestionar los enormes desembolsos, especialmente después de que la empresa china DeepSeek lanzara un nuevo modelo de inteligencia artificial de código abierto que, según afirma, rivaliza con las capacidades de la tecnología estadounidense a una fracción del costo.
Las acciones cayeron alrededor del 4% en el comercio posterior al cierre, luego de cerrar en US$ 442,33.