El presidente de General Motors, Rick
Wagoner, dijo estar confiado en que la ayuda anunciada hoy por el
Gobierno estadounidense para el sector del automóvil será suficiente
para permitir reflotar la compañía que dirige.
Wagoner declaró durante una rueda de prensa en Detroit que "la
cantidad será suficiente" y que está confiado en que GM cumplirá con
los requisitos impuestos por Washington sobre la viabilidad de la
empresa.
La ayuda anunciada hoy por el presidente George W. Bush estipula
que GM recibirá de forma inmediata US$9.400 millones y
Chrysler otros US$4.000 millones.
En febrero, GM tendrá acceso a otros US$4.000 millones.
La compañía indicó que ha empezado a trabajar para finalizar el
acuerdo y que espera tener acceso a los fondos el 29 de diciembre.
Wagoner, que agradeció en varias ocasiones a la administración
del presidente George W. Bush la concesión de los préstamos, señaló
que ahora la compañía se concentrará en "implementar de forma total
y rápida el plan de reestructuración" que GM presentó ante el
Congreso.
El directivo aseguró que ese plan es la guía "para una nueva GM",
que, según él, producirá "excelentes productos con una calidad de
clase mundial".
Wagoner reveló que las negociaciones finales para conseguir la
ayuda, que se produjeron en la noche del jueves, fueron "bastante
sencillas", aunque también añadió que "en las últimas seis semanas
he pasado más tiempo al teléfono que en los seis años anteriores".
El anuncio de la concesión de préstamos a General Motors y
Chrysler se tradujo de forma inmediata en un ascenso de las bolsas y
de los títulos de GM y Ford, las dos compañías que cotizan en el
mercado de valores.
Dos horas después de la apertura de los mercados en Wall Street,
las acciones de GM se cotizaban por encima de los US$4, con una
ganancia del 12% con respecto al cierre del jueves.
Por su parte, los títulos de Ford (que no necesita la ayuda
federal) se acercaban a los US$3 y ganaban un 4,58%.