El proceso de quiebra de la fallida isapre Masvida está pronto a cumplir un hito importante. El lunes, el estudio Nelson Contador & Compañía envió la propuesta de acuerdo final para pago a acreedores, la que deberá ser sometida a votación el próximo 10 de octubre.
De aprobarse este plan de pagos, Nexus deberá inyectar los $ 27 mil millones que acordó tras quedarse con la cartera de beneficiarios de la ex isapre.
Para lograr esta luz verde, el administrador provisional, Robert Rivas, está negociando con cada uno de los mayores prestadores para llegar a un consenso sobre el monto adeudado, de manera que no existan diferencias en las cifras de las acreencias.
Dichas negociaciones permitirán que el próximo lunes, martes y miércoles -fechas en que se realizarán audiencias de conciliación en tribunales, por reparos que han tenido alunos acreedores-, las partes lleguen sin diferencias.
Rivas propuso esta modalidad para solucionar antes de las audiencias las más de 440 objeciones que tienen los prestadores.
Según un escrito ingresado por el veedor Patricio Jamarme, existen diferencias por el no registro de facturas en la contabilidad de la empresa, facturas no registradas o rechazadas, y otras por facturas parcialmente pagadas.
Rivas ya llegó a acuerdo con la Red Salud UC Christus por un total de $ 5.466 millones y tiene negociaciones con Indisa y Sanatorio Alemán, entre otros.
Propuesta de acuerdo
El documento que ingresó al tribunal establece las condiciones de pago y distribución de los fondos que regirán una vez que se apruebe la reorganización concursal.
Así se reconoce a dos tipos de deudores. Los valistas, cuyo pago será a prorrata del valor total de su deuda una vez que se apruebe el acuerdo y los prestadores de salud que “gozan de derecho preferente de pago de la Garantía Legal de acuerdo al orden de prelación establecido”.
Según agrega, dado que la garantía legal no alcanzará a cubrir el 100% de la deuda, el saldo pendiente deberá ser repartido a prorrata con el monto de los otros deudores como los de factoring y los bancos en la reorganización.
Se designará una comisión de acreedores y un interventor que velará por el cumplimiento de este acuerdo, incluida la venta de inmuebles de la ex Masvida.
En caso en que no se logre cubrir el 100% de la deuda, los saldos de los valistas “se entenderán remitidos y extinguidos para todos los efectos legales” y en el caso de los prestadores, “el interventor concursal deberá emitir un certificado que declarará la inexistencia de fondos para el pago del saldo insoluto del respectivo crédito”.