A Donald Trump “el mundo no debería tomarlo muy en serio”, afirma tajante el filósofo y economista francés Guy Sorman, cuando analiza la nueva guerra comercial en la que se ha visto sumida la economía global, debido a las políticas comerciales desplegadas por el retornado mandatario estadounidense.
El autor de Made in USA (2004) y Economics Does Not Lie (2009), entre otras obras, está convencido de que serán los movimientos de Wall Street y las consecuencias inflacionarias en Estados Unidos los que hagan retroceder a Trump en su arremetida arancelaria. Mientras que alerta sobre las represalias que estan adoptando los otros países atacados por Trump, pues esos aranceles pueden ser -a su juicio- aún más perjudiciales para la estabilidad económica.
“Las industrias que necesitan cobre de Chile seguirán comprándolo, incluso si tienen que pagar un precio más alto por un arancel, simplemente, porque no hay alternativa”.
- ¿Cómo ve la política comercial de Trump en este segundo mandato que recién comienza?
- Trump se ha vuelto mucho más extremo. Él piensa que Dios lo ha designado para transformar a EEUU. Se ha vuelto bastante extremista, cree que lo sabe todo y el problema es que, en lo que respecta a la economía, no sabe nada. Todas las decisiones que tomó están inspiradas en el pensamiento económico del siglo XIX. Su héroe es el Presidente (William) McKinley y está haciendo exactamente lo que McKinley hizo hace mucho tiempo, que fue construir una industria dentro de EEUU mediante la imposición de aranceles muy altos que protegían el mercado interno.
Pero eso no tiene sentido hoy en día porque no hay un solo producto que se produzca en un solo país. EEUU no está en condiciones de producir algo sin importar tecnología o materiales y piezas de repuesto. Por lo tanto, su política se basa en una ignorancia total, tiene una percepción totalmente errónea de cómo funciona la economía moderna y, en realidad, es una especie de suicidio para la economía estadounidense.
Si sigue adelante con esa política arancelaria, solo traerá inflación, desempleo y trastornos en la producción, porque EEUU no puede reemplazar lo que importa o podría reemplazarlo, pero en 20 años.
Lo que hace no tiene ningún sentido. Trump no piensa a largo plazo, solo cómo permanecer día a día en el centro de atención y demostrar que está en el poder.
Lo bueno de eso es que cambia de opinión de un día para otro. En política exterior, quería tomar el control de Gaza y después de dos días, cuando los egipcios y los sauditas dijeron que de ninguna manera, Trump comenzó con Ucrania. Lo mismo ocurre con la economía, ahora se trata de aranceles, mañana será otra cosa.
El único índice que Trump realmente sigue, porque esa es su educación, es la bolsa de valores. Wall Street cae y cambia su política. Creo que esto sucederá.
- Algunos califican la política de Trump como “transaccional”, la de un negociador. ¿Discrepa?
- A Trump le gusta que lo vean como un ganador y como un negociador, pero es muy fácil entender cómo trabaja, cómo funciona su mente. Lo adulas, haces algunas concesiones y se olvida para pasar a otro tema. No tiene absolutamente ninguna visión a largo plazo.
- ¿Qué opina de la decisión de China y Canadá de tomar represalias contra EEUU?
- Es un error. Pero lo hacen por razones internas. En Canadá, Justin Trudeau se enfrentará en un par de semanas a una elección muy difícil. La única forma de ganar, de vencer a los conservadores, es jugando con el espíritu nacionalista de los canadienses. Trudeau aumenta los aranceles para demostrar que también es un gran jefe y que es capaz de resistir a Trump.
Lo mismo ocurre con China. Es una dictadura, pero existe una opinión pública. El pueblo chino quiere ser reconocido como un gran pueblo y no quiere ser tratado como una nación de segunda categoría. Así que, en cierto modo, el líder chino, Xi Jinping, también aumenta los aranceles. Es inútil, él lo sabe.
- Como están las cosas, ¿qué impactos económicos prevé?
- Con los aranceles de represalia entras en una guerra comercial y perturbas todas las líneas de producción. Se están complicando la vida, con inflación global y desorden. Así que mi consejo es que dejen que Trump juegue con los aranceles y pronto verá que son un desastre para la economía de EEUU.
- ¿En qué posición queda la Fed?
- La postura de la Reserva Federal es muy racional, implemente, esperar y ver qué pasa, no actuar, no reaccionar exageradamente.
Por cierto, el mercado entiende bastante bien el panorama porque el dólar estadounidense ha estado muy estable. Hay un contraste interesante entre la agitación que provocan los aranceles de Trump y el mercado, que mantiene el dólar muy estable. El dólar sigue siendo una moneda mundial, predecible y estable.
Cobre chileno
- ¿Chile debería prepararse para posibles aranceles al cobre, dada la investigación en curso iniciada por la administración Trump?
- No deberían reaccionar en absoluto. La razón principal por la que EEUU compra cobre a Chile es porque necesita el cobre chileno. El cobre se ha convertido en un producto muy raro en el mundo hoy en día. Y el litio es el próximo.
La mejor manera en que Chile puede enfrentar es no reaccionando exageradamente, porque no habrá cambios en el flujo de explotación. Es decir, las industrias que necesitan cobre de Chile seguirán comprándolo, incluso si tienen que pagar un precio más alto por un arancel, simplemente, porque no hay alternativa.
Entonces, si aumentan los precios del cobre chileno, ¿cuáles serían las consecuencias para Chile? Ninguna, pero habrá consecuencias muy graves para EEUU porque el cobre está en todas partes. Y esto significa que todos los productos que contengan cobre subirán de precio y habrá inflación en EEUU, no en Chile.