Hasta el 9 de diciembre pasado todo era miel sobre hojuelas en la relación entre Chile y Argentina. Sin embargo, el aterrizaje del peronista Alberto Fernández en la Casa Rosada generó una tensión entre su administración y La Moneda, ya que el presidente Sebastián Piñera y el exmandatario argentino Mauricio Macri cultivaban una importante cercanía en muchos ámbitos, particularmente en el político, lo que no ocurre con la administración Fernández.
A inicios de abril surgió la primera polémica a raíz de la comparación que el mandatario argentino hizo con la forma en que Chile está enfrentando la pandemia del Covid-19, señalando que su administración lo ha hecho mejor que la de Piñera. Y ahora, la relación vuelve a enturbiarse, tras el consejo que Fernández le dio a parte de la oposición chilena, planteando que vuelvan a unirse y "zanjen diferencias para poder recuperar el poder en favor de los chilenos".
Ello provocó una fuerte molestia de La Moneda, que ayer domingo expresó su molestia con la administración de Alberto Fernández, por sus declaraciones durante la reunión del Grupo de Puebla, el viernes, donde deseó que la izquierda chilena vuelva a gobernar. La cancillería citó al número dos de la embajada argentina en Santiago, Carlos Mascías para expresarle su "extrañeza" por lo que consideró una "injerencia" argentina.
Pero este mediodía, Alberto Fernández habló con Piñera durante 45 minutos. Según consignaron los medios trasandinos, la Presidencia de ese país informó que durante esa conversación telefónica, ambos mandatarios destacaron el vínculo personal que mantienen y la relación histórica que une a Argentina y Chile. Los dos presidentes coincidieron en que el impacto del coronavirus "nos ha dado vuelta la economía a todos" y que están enfrentando a "los mismos dos adversarios: la pandemia y la recesión".
Política exterior
En este sentido, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, el socialista Juan Pablo Letelier, lamenta que se produzca este debate con nuestro principal vecino con el que "nos unen demasiadas cosas, historia e identidad, entre otras", dice. Pero, advierte, "estos desencuentros entre presidentes en nada contribuyen a una buena relación"
A juicio de Letelier, quien no participó de la polémica cita, "hay que entender que así como Piñera es amigo de Macri, nosotros también dialogamos con los nuestros y nuestro sector siempre ha cultivado relaciones internacionales".
Latelier atribuye estas polémicas con Argentina a que "tenemos una Cancillería bastante deficiente y un Presidente que se equivoca permanentemente en los temas internacionales. Un ejemplo de ello es su viaje a Cúcuta. Esa es la política exterior que tenemos".
"Hecho anecdótico"
Como un "hecho anecdótico, una desubicación en especial en el contenido" califica el senador Ricardo Lagos Weber (PPD), también integrante de la Comisión de RREE, la conversación entre Alberto Fernández y algunos representantes de la oposición chilena que participaron en la reunión convocada por los fundadores del Grupo de Puebla, a la que no fue convocado.
Y agrega que "debemos tratar que nuestras relaciones Argentina sean buenas o las mejores", porque "esta pandemia nos acompañará durante mucho tiempo y el flujo de nuestras fronteras será constante e intenso, por lo que hay que tender puentes para tener un trabajo en conjunto entre ambas naciones para enfrentarla". En este sentido, manifestó su esperanza de que ambos países consigan mantener una relación fluida.
Respetar políticas internas
Desde el oficialismo, el diputado de Evópoli y vicepresidente de la Cámara, Francisco Undurraga, lamenta profundamente que se hayan producido las diferencias entre ambas naciones. Sin embargo, respalda la actitud asumida por el gobierno de Chile. Pero en la misma línea de parlamentarios opositores señala que los dos países "tenemos que entender y respetar las políticas internas de cada país".
Undurraga recuerda que tradicionalmente existe con Argentina una relación de hermandad entre ambos pueblos y respecto de la situación comercial, que si bien hoy día se ve más difícil por el tema de la pandemia, asevera que ésta no debería salir afectada por este roce diplomático.
Por su parte, el senador Manuel José Ossandón (RN) –integrante de la Comisión de RREE- atribuye las polémicas a "la tensión global que estamos viviendo, a este nerviosismo que tienen los gobiernos para salvar la coyuntura"; pero no cree que perjudiquen la histórica relación que los Estados han construido por años.
El senador oficialista estima que lo sucedido "es un tema menor", pero "la oposición tiene que dar explicaciones frente al país y, si necesitan ideas para reorganizarse, deben hacerlo fuera de Chile", añade.
En la misma línea, el integrante de la Comisión de RREE de la Cámara, diputado Issa Kort (UDI), recuerda que Chile y Argentina comparten unas de las fronteras más extensas del mundo. "Como todos los vecinos tenemos encuentros y diferencias, sin embargo, creo que hoy en día predominan mucho más los encuentros. Tenemos que entender que somos países complementarios, ellos con una salida estratégica al Atlántico y nosotros al Pacífico".
Presidente amateur
Kort explica que en la actualidad existe un Comité de Integración Binacional que ha trabajado bajo el alero de ambas Cancillerías, "es una instancia muy notable ya que está conformada por una gran diversidad, por ejemplo: José Miguel Insulza, Andrés Allamand, Carolina Goic y yo desde el Parlamento. También están exparlamentarios y exembajadores como Sergio Bitar y José Antonio Viergallo. Del mundo empresarial Janet Awad, ente otras personas y esa instancia no es un grupo de diálogo decorativo, todo lo contrario, tendríamos espacios de propuestas, análisis y debates sobre cómo enfrentar juntos el futuro", explica.
Sin embargo, desde su punto de vista, "desde que asumió Alberto Fernández se han producido algunos hechos poco favorables al buen clima de las relaciones que veníamos construyendo", por lo que "creo que no hemos retrocedido un milímetro lo que hemos avanzado, pero sí siento que ha habido un congelamiento de ese sentido binacional".
Pero señaló que "las claras diferencias políticas entre un gobierno y otro no son justificación alguna para mantener distancias. Al presidente Piñera le correspondió trabajar con los Kirchner y a la presidenta Bachelet con Macri y fuimos siempre avanzando", por lo que espera que Alberto Fernández "asuma una nueva actitud, no cometa errores de un presidente amateur y se convierta en un líder regional reconocido por sus aportes y no por esos provocaciones".
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