Se terminan los subsidios: recaudación del Mepco se acercó a US$ 480 millones al cierre del primer semestre

Lo que va de 2023 podría definirse como un período de cierta normalización en el precio de algunos bienes básicos, afectados al alza durante el año previo como consecuencia de los efectos de la invasión de Rusia en Ucrania.

Uno de los que mayores dolores de cabeza trajo para el bolsillo de los consumidores en Chile fueron los combustibles, cuyo valor de venta superó los $ 1.200 por litro durante 2022 para las gasolinas de 93 y 97 octanos.

Aquello provocó que el Mecanismo de Estabilización de Precios de los Combustibles (Mepco) entregara millonarios subsidios para contener el aumento de los valores de la energía automotriz, los que ascendieron a más de US$ 2.700 millones.

Sin embargo, el cambio de escenario, con una baja en la cotización de los combustibles y de los barriles referenciales de petróleo en el mercado internacional, ha devuelto el mecanismo a una cierta normalidad.

Un informe del Centro Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales de la Universidad Católica (Clapes UC) cuantifica este cambio de tendencia, con un Mepco que pasó de subsidiar los combustibles a recaudar el impuesto específico a este producto.

El análisis de los investigadores Luis Gonzales e Isidora Lara, determina que entre enero y junio de este año el mecanismo recaudó US$ 475 millones como consecuencia del descenso de los combustibles a nivel interno.

Isidora Lara, economista e investigadora de Clapes UC. Luis Gonzales, Coordinador Cambio Climático, Energía y Medio Ambiente Clapes UC.

¿La razón? El Mepco establece que, en la medida que el precio de las gasolinas y el diésel sube, se reduce transitoriamente el impuesto específico, lo que deriva en que el Fisco contiene el incremento vía subsidios; y, viceversa, recauda el gravamen cuando el valor de la energía se reduce.

Entre enero e inicios de julio de este año, la recaudación se divide en US$ 28,7 millones provenientes del valor de las gasolinas, mientras que los restantes US$ 446 millones se explican por la tributación del diésel.

“Al cierre del primer semestre de 2023, el precio del barril de petróleo del marcador referente para el mercado de combustibles de consumo automovilístico, Brent, termina en torno a los US$ 80 por barril, cifra que es similar a 12 meses previos en junio de 2022. Una de las principales razones detrás de la menor demanda global por petróleo radica en las dudas con respecto al crecimiento en China. Esta reversión alivia las presiones inflacionarias en todo el mundo, como es posible ver en Estados Unidos o en economías emergentes como la chilena”, explican Gonzales y Lara.

Factores de la estabilización

En enero se publicó una nueva modificación legal al Mepco, que establece que las variaciones de precios ya no serán semanales, sino cada tres semanas.

Así, también se dejaron atrás las sucesivas modificaciones en el tope del subsidio que pudiera entregar el mecanismo. El original se estableció en US$ 500 millones, pero sucesivamente se fue aumentando hasta llegar a hasta US$ 3 mil millones en 2022 ante el recrudecimiento de los efectos macroeconómicos de la guerra en Europa del este. El nuevo límite está fijo en US$ 1.500 millones.

En el marco de este esquema de variaciones, un factor que ha permitido una estabilización del precio de la bencina es que el dólar ha oscilado en torno a los $ 800, dejando atrás también el peak sobre $ 1.000 del año previo.

Según explica el informe, para las gasolinas de 93 y 97 el traspaso de la estabilización del dólar se ha ido materializando en función a las oscilaciones semana a semana.

En cuanto al diésel, el traspaso ha sido mucho más lento debido principalmente al acuerdo alcanzado el 21 de noviembre de 2022, cuando el Gobierno se comprometió a mandar un proyecto de ley para crear un mecanismo que estabilizara el precio del diésel por un plazo de 90 días.

Considerando las modificaciones vigentes desde el primero de enero, hoy el Mepco se encuentra en una condición de recaudación neta, pero en el acumulado desde su inicio (2014), existe un subsidio neto, pero que se ha reducido desde los casi US$ 2.800 millones del 2022 a US$ 2.172 millones a julio.

“Observando la descomposición del gasto acumulado del sistema, el comportamiento del diésel se encuentra muy próximo a recuperar el subsidio entregado en 2022. Sin embargo, aún la tarea pendiente se encuentra en la gasolina”, concluyen los investigadores.