La industria terminó en mal pie el primer semestre y cayó arrastrada por la manufactura

Una disminución de 1% anotó en junio el Índice de Producción Industrial (IPI) comparado con igual mes de 2023, según informó esta mañana el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). 

Con un día hábil menos, la serie con ajuste estacional y corregida de efecto calendario del IPI mostró una baja mensual de 0,4% y un alza de 0,1% en un año.

Determinante en este resultado fue que el Índice de Producción Manufacturera (IPMan) descendió 4,8% en doce meses, explicado en gran medida, por la baja interanual de 10,4% en elaboración de productos alimenticios.

En esto último influyó una baja en la producción de pescado, carne de pescado, filetes de pescado, otras carnes de pescado e hígado y huevos de pescados congelados, debido a una menor cantidad de recurso biológico disponible para captura.

Le siguió en incidencia negativa la fabricación de productos elaborados de metal, excepto maquinaria y equipo, que disminuyó 18,8%, causada por una alta base de comparación, generada por la elaboración de productos metálicos para uso estructural, durante junio del año anterior.

Las alzas

Como contraparte, el Índice de Producción Minera (IPMin) presentó un aumento anual de 2,2%, como consecuencia de la mayor actividad registrada en minería no metálica, que creció 26,7%.

Por el contrario, la minería metálica se contrajo 0,8% en comparación con igual mes del ejercicio anterior, a raíz de una disminución en la extracción y procesamiento de cobre. Esto, dijo el INE, fue causado por una menor producción de molibdeno, lo que no pudo ser contrarrestado por el alza que exhibió el cobre en el período.

En paralelo, la producción de recursos energéticos se redujo 2,2% como consecuencia de una menor elaboración de gas natural.

El mismo camino siguió el Índice de Producción de Electricidad, Gas y Agua (IPEGA), que se expandió un leve 0,9% en doce meses. En este segmento la protagonista fue la mayor actividad registrada en electricidad, que se incrementó 2,9%.

Por el contrario, gas retrocedió 12,8% ante una menor regasificación del tipo natural licuado.  La distribución de este producto subió en el suministro, principalmente hacia consumidores residenciales.

Finalmente, el agua afectó el índice general al decrecer 1,2%, a causa de una menor distribución de agua hacia el destino residencial.