Desde la semana pasada que el Tribunal de Garantía de Rancagua había declarado admisible la querella interpuesta por el abogado de Renovación Nacional, Eduardo Riquelme, en contra de Sebastián Dávalos, ex director sociocultural de La Moneda; Cynthia Ross, encargada de estudios de la municipalidad de Machalí; el actual seremi de Vivienda de la Región de O'higgins, Wilfredo Valdés y el ex director de Obras de la Municipalidad de Machalí, Jorge Silva por los presuntos delitos de negociación incompatible y violación de secreto, en el marco del caso Caval.
Pero, sólo ayer fueron notificados y de inmediato solicitaron una reunión -que se efectuará hoy a las 15.00 horas en Rancagua- con el fiscal que instruye el caso, Luis Toledo. El objetivo de la cita es pedir el acceso a la carpeta investigativa y, así, estudiar nuevas diligencias en la causa que investiga la compra por parte de la empresa Caval, de propiedad en un 50% de la nuera de la presidenta Bachelet, Natalia Compagnon, de tres predios en la comuna de Machalí y la posible intervención de funcionarios públicos en el cambio de uso de suelo.
A este último asunto es al que apunta la querella de RN, centrando el foco en el hijo de la mandataria, con el propósito de indagar si llevó a cabo algún tipo de influencia mientras ejerció como director sociocultural del gobierno.
El diputado de RN que impulsó la querella, José Manuel Edwards, señaló su satisfacción por la recepción de la acción judicial e indicó que existen fundados argumentos para pensar que las personas mencionadas en el texto cometieron los delitos que se señalan: "Nos querellamos, entre otras cosas, para tener acceso a la carpeta investigativa y así poder pedir diligencias que el fiscal aún no ha tomado en cuenta y aportar, de este modo, al esclarecimiento de estos hechos".
Desde la parte querellante también valoran cómo hasta ahora la Fiscalía de la VI Región está llevando a cabo la investigación con importantes y contundentes señales como la incautación de las herramientas de trabajo de Dávalos. Edwards cree que se está llevando a cabo una labor seria que debería desembocar en buenos resultados que arriben a la verdad sobre los hechos.
En ese plano, una de las aristas que más preocupa a los querellantes es determinar la influencia que podría haber tenido Dávalos en el eventual cambio al plan regulador de la comuna. Estas sospechas parten del antecedente de la reunión que sostuvo Dávalos junto a su señora, con el vicepresidente del directorio del Banco de Chile, Andrónico Luksic, para la obtención del crédito por $6.500 millones y que serían prueba del interés del primogénito de la mandataria por dicha compra.