La volatilidad de los mercados y sus efectos sobre las expectativas han elevado el grado de incertidumbre respecto a 2012. Con este escenario, las empresas locales miran con mayor cautela no sólo lo que sucede a nivel internacional, sino que también las consecuencias que ya está teniendo sobre la economía real chilena.
El martes de la semana pasada el Banco Central publicó una cifra preocupante. La producción industrial cayó 0,8% en octubre, su peor nivel desde el terremoto del año pasado y anticipa un Imacec por debajo de 4%.
Un día después, el presidente del ente rector, José de Gregorio, sostuvo que la economía chilena se está desacelerando hacia su tasa de tendencia de largo plazo de 5%.
Frente a este escenario recesivo, DF Unidad de Inteligencia analizó el nivel de endeudamiento que tienen las empresas del IPSA, el indicador de la bolsa que reúne a las 40 firmas más transadas del mercado bursátil.
Sin incluir a los 4 bancos que forman parte del índice, ya que éstos usan diferentes métodos contables, se observa que los compromisos a pagar en un año han aumentado un 3,2% en septiembre de este año, en comparación a los montos que se informaron a diciembre del año pasado.
Los pasivos corrientes suman US$ 33.342 millones, poco más de US$ 1.000 millones adicionales que lo que se contabilizaba en diciembre.
El total de las deudas –incluido los pasivos no corrientes- creció un 7,7%, llegando a US$ 134.850 millones, unos US$ 9.700 millones más que a fines del ejercicio anterior.
Ahora bien, estos montos se deben analizar desde el punto de vista de su posible efecto en las empresas. En ese sentido, para ver el riesgo del nivel de endeudamiento veremos el ratio Leverage. Este valor es óptimo cuando es cercano a 1, tanto por la izquierda como por la derecha.
En los compromisos de corto plazo, hay un promedio que indica que por cada peso del patrimonio hay 0,3 pesos de deuda.
En tanto, al revisar la deuda total por cada peso del patrimonio hay 1,2 pesos en pasivos.
Con todo, la balanza de pagos muestra que la amortización hasta un año de deuda externa bruta de los bancos llega a US$ 9.586 millones en el tercer trimestre. En el caso de los otros sectores –empresas- las cifras del Central muestran una amortización a un año de US$ 5.167 millones.
En total, incluidos gobierno central y autoridades monetarias, la amortización a dicho plazo llega a US$ 16.833 millones en el tercer trimestre de 2011.
Según publicó DF hace unos días, las principales empresas del país ya tienen internalizado sus planes para levantar financiamiento durante el próximo año. En su mayoría la opción será emisiones de bonos en chile o usar recursos propios y así mantener sus objetivos de inversión.
Todo parece indicar que el nivel de endeudamiento de las empresas del IPSA está en niveles normales, lo que les daría una mayor fortaleza para enfrentar una desaceleración o crisis de la economía global.