Las acciones europeas terminaron la sesión de ayer con un repliegue por el escenario de una posible moratoria de la deuda griega. Este panorama se contagió rápidamente a Wall Street desde la apertura y también a las plazas de Latinoamérica.
La incertidumbre se volvió a tomar el día, mientras que los mercados estuvieron marcados por bajos montos transados y la cautela se impuso en una jornada que finalizó con caídas moderadas. Con todo, el IBEX logró cerrar la primera sesión de la semana por encima de los 8.800 puntos, mientras que el DAX germano prácticamente no registró variación con respecto al viernes. El CAC y el FTSE 100 no se desacoplaron de la tendencia del Viejo Continente y cerraron el primer día de la semana con caídas menores al 1%, a la espera de una salida a la crisis helena.
En la plaza norteamericana, por su parte, el Dow Jones bajó hasta los 12.800 puntos, al tiempo que el S&P 500 anotó también una moderada caída que lo situó en 1.344,33 unidades.
Para la renta variable latinoamericana el desempeño estuvo alineado al resto de los países. El mercado brasileño se desacopló a última hora de la tendencia y anotó una mínima variación que lo llevó a cerrar en azul.
Para el caso del IPSA, que reúne a las 40 principales acciones que se transan en bolsa chilena, pese a las compras de último minuto que tuvieron al indicador con cifras positivas durante dos momentos de la jornada, correcciones finales lo llevaron a finalizar la jornada con un moderado repliegue hasta los 4.377,68 unidades. Esta caída estuvo influenciada principalmente por el desempeño del sector salmón, que bajó 3,02%; utilities con una baja de 0,89%; e industrial que cedió un 0,65%.
Siguiendo en la región, el mercado colombiano tuvo un desempeño en línea con las plazas del norte y completó sus operaciones perdiendo con una moderada pérdida de 0,1%. La plaza mexicana, por su parte, permaneció cerrada por feriado nacional.