La fuerte baja en las tasas de interés de los papeles del Banco Central en los últimos tres meses (BCU y BCP), motivada en gran medida por la aversión al riesgo de los inversionistas, hace pensar a los analistas de renta fija que en el futuro cercano estos activos volverán a transarse a niveles más “normales”.
Si bien en los últimos días los bonos en pesos y en UF del emisor han experimentado ciertas alzas -lo que da cuenta de un mercado vendedor-, los actuales niveles indicarían que estos instrumentos aún tendrían espacio para acentuar dicha tendencia.
El acotado aumento de los últimos días según la gerente de finanzas de Nevasa, María Dolores Roeschmann, “se explica en parte por las menores expectativas de nuevos recortes de tasa por parte del Banco Central, debido a una mayor inflación y a un mayor crecimiento”.
Pese a la menor demanda de estos papeles libres de riesgo, para el gerente de renta fija nacional de Penta AGF, Carlos Milla, “todavía no hay una tendencia clara porque persiste el temor y el shock del año pasado fue tan fuerte que los inversionistas no se atreven a salir con todo hacia las acciones”, lo que pondría en duda una mayor salida, con la consiguiente alza en las tasas.
Con todo, según el director de estrategia de IMTrust, Matías Braun, dado que estas tasas base aún están en niveles bajos con respecto a sus rendimientos de hace tres meses atrás, a los papeles de los tramos más largos sobre todo, “aún les queda por subir”. Además, “los bonos se pusieron muy caros relativos a la renta variable, que estaba cayendo también muy fuertemente”, agrega Braun.
Así, dado que los papeles del emisor podrían perder algo de valor en el futuro cercano, los bonos corporativos serían una alternativa atractiva.
“La renta fija local corporativa tiene espacio para bajar sus spread, que habían subido bastante después del caso La Polar”, asegura Braun. “Nosotros estamos viendo que los papeles corporativos de bajo y mediano riesgo todavía tienen un spread bastante alto y, de esperar que las tasas del Central suban, los corporativos se van a defender de estas subidas porque tienden a mantener sus tasas”, argumenta.
High yield para los más audaces
Para quienes pueden aguantar un mayor riesgo, esperando también un mayor retorno, están los bonos corporativos high yield o de alto rendimiento.
Se trata de papeles con retornos cercanos al 7,5% anual de empresas, que si bien cuentan con una menor clasificación de riesgo, muchas de ellas han podido resistir dos crisis financieras y han logrado cumplir con sus compromisos de pago.
Para el gerente general de Banmerchant Capital, Nicolás Bravo, los bonos high yield latinoamericanos “presentan una mejor oportunidad de inversión dado que sus spreads respecto al high yield de Estados Unidos son aún mayores”.
De hecho, en estos momentos la región latinoamericana tiene un promedio de 710 puntos base, frente a los 630 puntos base que ofrece el mercado de Estados Unidos. Es así como los actuales niveles ofrecen para Latinoamérica retornos anuales que superan el 8%.