El presidente ruso, Dmitri Medvédev,
expresó hoy su esperanza de que las relaciones con Estados Unidos
sean mucho más sólidas cuando Barack Obama asuma el poder el 20 de
enero próximo.
"Espero que seamos capaces de establecer unas relaciones mucho
más sólidas y eficaces que hasta ahora", señaló Medvédev en una
entrevista con los canales públicos de televisión.
Medvédev, que asumió el poder en mayo pasado, subrayó que durante
los últimos años "se desperdiciaron muchas oportunidades de entablar
unas relaciones normales".
"Bajo nuestro punto de vista, no fue por nuestra culpa. Me
gustaría que nuestras relaciones fueran de socios y de ninguna otra
clase", agregó.
Medvédev señaló que durante su conversación telefónica que
mantuvo recientemente con el presidente electo norteamericano éste
comentó "que veía las relaciones con Rusia como una de las
principales prioridades de la política exterior estadounidense".
"Estoy al cien por cien de acuerdo con él", dijo.
Medvédev tiene previsto entrevistarse por primera vez con Obama
poco después de su ceremonia de investidura.
Con ocasión de la elección de Obama como presidente
estadounidense el 5 de noviembre, Medvédev anunció el plan de
desplegar cohetes tácticos Iskander en el enclave báltico ruso de
Kaliningrado como respuesta a los planes de Washington de emplazar
elementos de su escudo antimisiles en Europa Oriental.
En las semanas siguientes Medvédev matizó sus palabras y se
mostró dispuesto a renunciar a ese plan si EEUU hacía lo mismo con
el escudo en la República Checa y Polonia, plan que Moscú considera
una amenaza directa para su seguridad.
Medvédev se reunió en tres ocasiones con el presidente
norteamericano saliente, George W. Bush, la última durante la cumbre
de la APEC en Perú en noviembre pasado.