Por Robin Harding
El informe mensual de nóminas no agrícolas de EEUU es el indicador económico más importante del mundo porque es amplio, representativo y oportuno.
El reporte confuso ocasional, sin embargo, es un recordatorio de que los indicadores están sujetos a grandes errores de muestra, revisiones posteriores y el embate de diversos shocks que tienen poco que ver con la salud subyacente de la economía.
El estudio de diciembre cayó en esta categoría, combinando un débil crecimiento del empleo de sólo 74 mil puestos, con un hundimiento en la tasa de desempleo desde 7% a 6,7%, pero igual contiene señales útiles.
Aunque la Oficina de Estadísticas Laborales ajusta las cifras por los patrones estacionales promedio, el tiempo que es mejor o peor que el promedio puede distorsionar los números, por ejemplo si es muy helado para la construcción en algunas áreas del país.
En teoría, si alguien trabajó durante la semana de la encuesta de empleo, debería ser contada como empleada. Pero 273 mil personas se reportaron como empleadas, pero no en el trabajo debido al tiempo. Eso es 100 mil más que lo normal para el mes, según Capital Economics. Al agregarlos, el análisis luce mucho mejor.
El tiempo fue peor a inicios de enero, por lo que podría arrastrar las cifras incluso más. Y no es la única distorsión. Los beneficios de desempleo extendidos expiraron a fines de diciembre y el próximo mes traerá revisiones anuales a los datos de empleo.
El efecto más probable del término de los subsidios es una caída mayor en el desempleo. Esto no ayuda a la Reserva Federal, porque enturbia la visión de la salud subyacente de la economía y complica su comunicación.
La baja en la tasa de participación, con un alza de 525 mil en las personas que no están en la fuerza laboral a un máximo de 91,8 millones, es otra mala noticia. Es especialmente confuso que la fuerza laboral sigue disminuyendo tan rápido luego de meses de buenos datos, lo que podría haber atraído a la gente de vuelta al mercado.
El debate continúa entre los miembros de la Fed que creen que gran parte del descenso se debe a las jubilaciones, por lo que será permanente, contra aquellos que esperan que muchos trabajadores busquen empleo cuando las condiciones mejoren.
La respuesta es crucial para la política. Si la participación no repunta, entonces las tasas de interés deberán subir antes.
El miércoles, el sondeo alternativo de ADP reveló que se crearon 238 mil empleos. El propósito de esta encuesta es predecir las cifras oficiales y para eso incorpora datos oficiales pasados.
La metodología de ADP fue revisada recientemente y aún no construye un historial, pero el gran error en diciembre no ayudará a su reputación como indicador útil.