Por Stefan Wagstyl
, Berlín
La canciller alemana Angela Merkel y sus eventuales socios de coalición están presionando para terminar un acuerdo esta semana sobre un nuevo gobierno con un programa que probablemente incluirá el primer sueldo mínimo nacional.
Luego de dos meses de negociaciones, se espera ampliamente que la alianza conservadora gobernante CDU/CSU de Merkel y el SPD de centro izquierda anuncien un pacto inter-partido mañana.
Pero aún existe una incertidumbre considerable sobre si es que los líderes pueden vender la coalición a sus miembros, particularmente el SPD, que por primera vez pondrá a votación el acuerdo entre sus 470 mil partidarios.
“Es muy posible que el SPD vote en contra”, aseguró el profesor Karl-Rudolf Korte de la Universidad Duisberg-Essen sobre el referendo, que se celebrará a principios de diciembre. “Estoy muy escéptico”.
Otros están más optimistas. La profesora Andrea Römmele de la Escuela de Gobernabilidad Hertie de Berlín espera que los miembros apoyen el acuerdo una vez que Sigmar Gabriel, líder del SPD, y otros pesos pesados del partido comiencen a hacer campaña a favor. Pero incluso ella admitió que “Angela Merkel está nerviosa”.
Como resultado, la canciller podría estar cediendo más terreno para lograr un pacto de lo que desean sus simpatizantes. El diario conservador Bild se quejó ayer de que el voto de los miembros del SPD era “más importante que el de millones de alemanes... una pequeña minoría puede tener más votos que la gran mayoría. Eso es grotesco”.
Ya parece haber un acuerdo sobre una demanda clave del SPD: un sueldo mínimo de 8,5 euros por hora. Los negociadores de la CDU, que alguna vez se resistieron, se están enfocando en reducir el impacto de la medida en los empleos en los sectores y regiones mal remunerados, incluyendo la ex Alemania Oriental.
Los socialdemócratas también están presionando fuerte por otro gran tótem político: doble ciudadanía para gente nacida en Alemania de origen extranjero, incluyendo la gran comunidad turca. Hoy, tales habitantes pueden tener dos pasaportes hasta los 18-23 años, cuando deben elegir. El SPD quiere ciudadanía doble de por vida. La CDU está lista para comprometerse en, por ejemplo, elevar el límite de edad. Pero no quiere rendise en la indivisibilidad de la ciudadanía alemana.