11 mujeres que “están dejando una huella” en la economía y que el FMI recomienda leer
El organismo internacional destaca a expertas que se han enfocado en cómo eliminar la pobreza, reinventar la economía del desarrollo o estudiar las políticas de género.
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Aunque las mujeres han realizado numerosos aportes a la economía, siguen estando subrepresentadas. Las vacaciones de verano en el hemisferio norte le parecieron una buena oportunidad al Fondo Monetario Internacional (FMI) para recordar esto, e invitar -a través de un blog- a sumar a “importantes pensadoras que están dejando una huella” a las lecturas estivales.
La selección la encabeza Rohini Pande, académica de Yale nacida en India, que ha hecho contribuciones “revolucionarias” a la economía política, al desarrollo internacional, a la economía de género, a la lucha contra la corrupción y contra el cambio climático.
Lisa D. Cook, académica de la U. Estatal de Michigan, se suma a los nombres destacada por su trabajo aplicando métodos académicos para evidenciar cómo el racismo y el sexismo han tenido un efecto negativo enorme en la economía de EEUU, temas que movimientos sociales como el Black Lives Matter y el #MeToo han terminado de poner en la agenda económica de esa nación.
La italiana-estadounidense Mariana Mazzucato es conocida por su idea de que los gobiernos deben aprovechar su poder para liderar en innovación y mejorar las condiciones de la humanidad. Los planteamientos de la académica del University College London son seguidos por Bill Gates, el diputado Giorgio Jackson e incluso el Papa Francisco, además de gobiernos de todo el mundo.
El FMI también recomienda leer a Esther Duflo, la segunda mujer y persona más joven en ganar el premio Nobel de Economía. El trabajo de la académica del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) se ha centrado en usar métodos de investigación experimentales para transformar la economía del desarrollo y combatir la pobreza, lo que la llevó a co-fundar el Laboratorio de Acción contra la Pobreza Abdul Latif Jameel, más conocido como J-PAL.
Olivia Mitchell, directora ejecutiva del Centro de Investigación de Pensiones y Jubilación de la escuela de negocios Wharton, en la U. de Pensilvania, transformó la investigación previsional al incorporar variables como la economía del comportamiento. Ha asesorado a gobiernos de todo el mundo y conoce de cerca Chile, pues participó de la Comisión Bravo convocada por Michelle Bachelet.
académica U. de Pensilvania. Lisa D. Cook Académica U. Estatal de Michigan.
Como una pionera de la economía del Internet es descrita Susan Athey, académica de Stanford que ha dedicado su trabajo a temas emergentes como la aplicación de la teoría de las subastas a los servicios en línea y la publicidad relacionada con las búsquedas.
Habiendo investigado más de 200 años de historia económica, Claudia Goldin ha sido elegida por su trabajo en materia de género. La académica de Harvard ha comprobado que la remuneración desigual entre hombres y mujeres refleja el alto costo de la flexibilidad laboral y la compatibilización del trabajo y la familia, más que de discriminación propiamente tal.
Desde el MIT, Kristin Forbes ha estudiado temas como el contagio financiero, los flujos de capital transfronterizos, los controles de capital y cómo las políticas económicas de un país tienen efectos secundarios en otros, pero también ha aplicado su investigación a desparasitar niños en economías en desarrollo para reducir la deserción escolar.
Centro para el Desarrollo Global.
A través del Centro para el Desarrollo Global, su fundadora Nancy Birdsall contribuyó a mostrar cómo las políticas de los gobiernos de países ricos y las instituciones financieras internacionales afectan al mundo en desarrollo, y planteó que estas pueden mejorarse para reducir la pobreza y la desigualdad.
La francesa Hélène Rey enseña en la London Business School, y de acuerdo al FMI “se ha ganado una reputación al desafiar la sabiduría aceptada”, sobre el sistema financiero internacional, el rol del dólar y otros grandes temas macroeconómicos.
Por último, la entidad recomienda a Sabina Alkire, directora de la Iniciativa de Desarrollo Humano y Pobreza de Oxford y sacerdotisa que ayudó a desarrollar un nuevo método para medir la pobreza multidimensional con el fin de erradicarla.