La crisis financiera se cobrará cerca
de 225.000 puestos de trabajo en el estado de Nueva York en los
próximos dos años, aseguró hoy el contralor (fiscal de cuentas) del
estado, Thomas DiNapoli.
"Wall Street es la locomotora que conduce las economías del
estado y de la ciudad de Nueva York, pero la crisis crediticia
global ha reducido su velocidad", señaló a través de un comunicado
de prensa DiNapoli.
El contralor del estado de Nueva York recordó que el sector
financiero perdió durante el año pasado 16.300 puestos de trabajo y
predijo que de aquí a octubre de 2009 la crisis financiera podría
cobrar otros 38.000 puestos en este sector y 10.000 más en el
sector bancario, de las aseguradoras e inmobiliario.
En total, DiNapoli calcula que 175.000 personas perderán su
empleo en el sector privado en la ciudad de Nueva York y 225.000 en
el estado en su conjunto como consecuencia de la crisis financiera,
aunque advierte de que "las pérdidas (de puestos de trabajo) podrían
ser mayores si la ralentización económica es más profunda y larga de
lo que se espera".
DiNapoli cree que "los altos ejecutivos de Wall Street deberían
renunciar a sus primas en estos tiempos difíciles", pues considera
"inapropiado recompensar un rendimiento bajo".
Asimismo, indicó que esas primas bajaron un 50% en los
dos años siguientes al estallido de la burbuja tecnológica y de los
atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 y calcula que
ahora podría ocurrir lo mismo.
La crisis financiera en Wall Street también afectará a las arcas
del estado de Nueva York, pues esperan recaudar US$6.500 millones menos en impuestos procedentes del sector financiero en los
próximos dos años.
DiNapoli consideró que aunque el alcalde de la ciudad, Michael
Bloomberg, y el gobernador del estado, David Paterson, han sido "muy
activos" a la hora de hacer frente al crisis, "Nueva York, como
otros estados, necesitará ayuda federal dada la magnitud del déficit
presupuestario previsto".