Carlos Furche, director general de Relaciones Económicas Internacionales, declaró que Chile desea que la cumbre de
líderes del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC), que
se celebrará este fin de semana en Lima, no esté copada por la
crisis financiera, al tiempo que apoya el futuro ingreso de más
países latinoamericanos a este grupo internacional.
"Es probable que este año, por la actual situación económica, esa
parte de la agenda (la crisis) tenga una enorme importancia, pero lo
que Chile busca es una perspectiva a largo plazo", declaró Furche.
"Además de fortalecer nuestra presencia en la cuenca de Asia
Pacifico, nosotros apostamos por una creciente apertura comercial y
la mayor convergencia posible, así como por el rescate de los temas
de cooperación técnica y también política", explicó.
Miembro de APEC desde 1994, Chile promueve en este foro la
inserción de América Latina en el Asia Pacífico, una zona que, según
ha dicho en diversas ocasiones la presidenta Michelle Bachelet,
"puede ser considerada la nueva frontera de América Latina".
Pero Chile, México y Perú son los únicos países latinoamericanos
de la APEC, que reúne a 21 naciones que representan el 56 por ciento
de la producción mundial y el 46 por ciento del comercio global.
Dado que es el país que posee el mayor grado de integración
económica con el resto de los socios, ya que el 40 por ciento de sus
exportaciones tienen como destino naciones asiáticas, "Chile tiene
razones más que poderosas para tener una presencia activa" en el
APEC.
"Chile tiene un papel bastante activo en el APEC. Tenemos
acuerdos comerciales con un buen número de países miembro, como
Canadá, México, Estados Unidos, Perú (acuerdo de complementación
económica), China, Japón, Corea, Australia, Nueva Zelanda, Singapur
y Brunei", detalló Furche.
Pero, "Chile quiere que haya "una mayor presencia de países de la
región" y por eso apoya "sin ninguna reserva" las aspiraciones de
Colombia, Costa Rica, Panamá y El Salvador para integrarse a APEC en
2010, año en el que concluye la moratoria para los nuevos ingresos.
De hecho, Chile es coautor de dos iniciativas "para transformar
la cuenca de Asia Pacífico en una sola zona comercial", señaló el
director general de Relaciones Económicas Internacionales de la
Cancillería chilena.
Una de ellas es el Arco del Pacífico, un bloque político
económico integrado por Perú, Chile, Panamá, México y Canadá, que
apuesta por el libre comercio y la inversión extranjera para
constituir "una especie de gran zona económica de este lado del
Pacifico".
Y la otra es la ampliación del P4, formado por Chile, Brunei,
Nueva Zelanda y Singapur, países que comparten una estrategia de
integración basada en el libre comercio, y al que desean sumarse
Estados Unidos, Australia, Perú y Colombia.
"Chile ha hecho una apuesta política de la mayor relevancia en el
Asia Pacífico", pero "es hora de hacerla extensiva a toda América
Latina" impulsando junto con México y Perú mecanismos de
concertación como la llamada Iniciativa del Arco del Pacífico, opina
Bachelet.
Chile no está solo en la búsqueda de la convergencia a largo
plazo, sino que actúa en coordinación con otros países de APEC,
destacó Furche, quien además apoya una mayor presencia de Brasil y
Argentina.
"Hemos invitado a grandes países del Atlántico a sumarse al Arco
del Pacífico porque entendemos que de manera creciente sus
principales mercados están allá", manifestó,
"Los países de la cuenca asiática no pueden dejar de ver a
grandes economías como Brasil, con 200 millones de habitantes".
enfatizó Furche.
Además, "desde un punto de vista práctico, buena parte de la
salida al Pacífico debería ocurrir a través de los puertos, las
carreteras y la logística de comercio exterior de Chile, y por lo
tanto, nuestro país es uno de los principales beneficiados de esta
mirada".
Respecto a las posibilidades de reanudación antes de final de año
de las negociaciones de la Ronda de Doha, el representante de la
Cancillería chilena dijo que es difícil que de la reunión de APEC
salga un acuerdo.
"Nosotros siempre estamos del lado constructivo de la ecuación
(...), pero un mínimo de realismo político indica que con Estados
Unidos en medio de una transición el tiempo no es ahora", aseguró.