En 2004, luego de un intenso brote de virus sincicial respiratorio (VSR), Alexis Kalergis, profesor titular de la Facultad de Ciencias Biológicas y de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica, comenzó a trabajar en el diseño de una vacuna que lo combatiera, con el objetivo de “entrenar” al sistema inmune del paciente, de manera que cuando se exponga al virus, el cuerpo esté preparado para eliminarlo de manera efectiva, afirma el investigador.
“Todos los bebés corren el riesgo de contraer el VSR antes de los dos años de vida, y el virus tiene efectos que pueden pasar del resfrío común, a hospitalizaciones graves o problemas neurológicos. Hemos demostrado que la enfermedad tiene efectos en el proceso de aprendizaje, por lo que el impacto, desde el punto de vista social de salud pública, es enorme”, acota.
En ese sentido, explica, que la vacuna contra el virus VSR aliviaría el impacto económico de esta enfermedad en el sector público, debido a que los síntomas le cuestan al sistema de salud público chileno aproximadamente
US$ 25 millones anuales en medidas paliativas de la infección, cifra que contrasta con los alrededor de US$ 1,5 millón que se han invertido en la investigación a lo largo de nueve años.
Durante 2013, la vacuna contra el virus VSR ideada por Kalergis, ha completado varias de las etapas exigidas (diseño, síntesis de una vacuna precompetitiva, evaluación de la estabilidad) y pronto comenzará a ser probada en humanos. Actualmente, está siendo fabricada en una planta en Estados Unidos que se dedica a la manufactura de vacunas experimentales y que trabaja de acuerdo con los estándares internacionales de la FDA (Food and Drugs Administration). Alexis Kalergis sostiene que, antes de llegar a la población objetiva final (los bebés), la vacuna contra el VRS debe seguir un protocolo de acuerdo a la normativa internacional, lo que tardará aproximadamente cinco años.
“Nuestros estudios, además de generar una patente internacional en Estados Unidos, han sido validados por la comunidad internacional de expertos a través de publicaciones en revistas de alto impacto, como la Academia de Ciencias de Estados Unidos”, dice el docente.
La vacuna que combatirá el VRS se adjudicó un proyecto Fondef (Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico) y, según indica Kalergis, se trata de una iniciativa “de interés público”,lo que quiere decir que se aspira a que la vacuna no tenga costo en territorio nacional, aclara el científico.
“El precio de la vacuna a nivel nacional será uno que pueda ser absorbido por el Ministerio de Salud de forma que no tenga costo para el paciente. Mi objetivo es que sea una de las vacunas del Programa Ampliado de inmunizaciones, vale decir, que sea gratis para el usuario, pero con un costo para el gobierno”, especifica.