En proceso de patentamiento se encuentra la iniciativa desarrollada por dos investigadoras de la Universidad Católica (UC) y que tiene como objetivo promover el parto integral en embarazos de bajo riesgo obstétrico. Se trata de una cama transformable vertical, diseñada por Mario Ubilla, decano de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Estudios Urbanos de la UC, para fomentar un parto humanizado, en donde participa la matrona, el equipo de salud y la familia, con el fin de lograr el apego y la fidelización del entorno cercano de la madre y el recién nacido.
La camilla de estructura metálica fue diseñada y construida en Chile, opera manualmente, es de bajo costo y no requiere cambios de geometría o variaciones posturales, explica Aixa Contreras, enfermera matrona, profesora asociada y directora de Extensión de la Escuela de Enfermería de la UC.
El desarrollo forma parte del proyecto del Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondef), Modalidad de asistencia de parto integral (Masip) que busca aportar al sistema público de salud chileno, “un modelo que proporcione a las mujeres embarazadas y sus familias un cuidado profesional integral en un entorno físico y humano, que brinda las condiciones para aumentar la satisfacción y rescatar el protagonismo de los usuarios en el proceso de nacimiento”, dice.
La iniciativa, liderada por Claudia Uribe, enfermera matrona, profesora asociada y jefa del departamento de Salud de la Mujer de la Escuela de Enfermería de la UC, engloba un paquete tecnológico de tres elementos: modelo de asistencia, capacitación de los profesionales para la implementación del sistema y acondicionamiento de los espacios físicos.
“El modelo incluye tres focos que le dan solidez como idea innovadora: cuidado continuo, con alta precoz y visita domiciliaria; participación activa y permanente de la usuaria y su familia; y entorno físico versátil que acompaña al proceso”, detalla Contreras, quien agrega que otorga un nivel de bienestar materno mayor que la atención tradicional, disminuye la incidencia de fórceps y cesáreas de bajo de riesgo, y aumenta la mantención de la lactancia materna exclusiva. Comenta que este método también puede aplicarse en situaciones de cuidados especiales como óbito fetal (muerte fetal in útero) y aborto, entre otros, que demanden de un apoyo integral del equipo de salud y acompañamiento permanente de la familia de la embarazada.
Hoy, Masip, está operando en el Hospital Sótero del Río y la idea es extenderlo a otros hospitales con servicios de atención de parto de baja complejidad, tanto del sector público como privado.