Empresas y Startups
Innovadora máquina de Gasco GLP mejora calidad y potencial de uvas tintas
Tecnología permite controlar enfermedades como la botrytis, reduciendo la contaminación por residuos químicos.
Por: Equipo DF
Publicado: Miércoles 5 de diciembre de 2012 a las 05:00 hrs.
Por Sebastián Vega M.
Hace cerca de cinco años, Gasco GLP tomó la decisión de desarrollar nuevos negocios a partir de un programa de intraemprendimiento llevado a cabo entre sus empleados, impulsando el interés por abrir nichos productivos inexplorados hasta ese momento. Fue así como surgieron oportunidades en sectores como la minería y agroindustria, aunque fue en la exportación de fruta -en especial en la de uva- donde la empresa concretó una innovación de importancia.
“La exportación de uva estaba teniendo un problema desafiante, que es el nivel de residuos químicos con que estaba saliendo de Chile al llegar a mercado sofisticados como los del norte de Europa”, cuenta Felipe González, gerente de nuevos negocios de Gasco GLP.
Esta problemática fue la génesis de la máquina térmica que en la actualidad comercializan, una tecnología que compraron a un inventor nacional y que, luego de licenciarle sus patentes, decidieron desarrollar para entregar una solución concretar a la industria vitivinícola. “Perfeccionamos, a través de la ingeniería, la forma de controlar enfermedades agrícolas con calor, en particular con la uva de mesa y la botrytis, que es un hongo que produce pudrición de la fruta”, explica el ejecutivo.
Funcionamiento
Remolcada por un tractor, la máquina cuenta con unas turbinas que expulsan aire caliente a la parte vegetal de los viñedos, a una temperatura que fluctúa entre los 115 y 130 grados Celsius, permitiendo una significativa reducción de los niveles de pirazina de las uvas tintas, quitándole ese carácter herbáceo que no es deseable en cepas como Cabernet Sauvignon, Merlot o Carménère.
“Si aplicamos calor en ciertos momentos de la producción, podemos bajar de manera sustancial los contenidos de pirazina y mejoramos radicalmente la calidad del vino Carménère”, puntualiza González, quien aclara que invirtieron más de US$ 500 mil en el desarrollo de una tecnología que ya está siendo aplicada en las viñas Casa Silva y Errázuriz (ver recuadro).
Según el gerente de nuevos negocios de Gasco GLP, la máquina tiene un régimen de arriendo de
US$ 10 mil por temporada, cubriendo hasta 50 hectáreas en uva de viña. “Queremos atender al 20% de la superficie plantada de vinos tintos de calidad reserva o superior”, dice González, aclarando que la idea es “trabajar con 100 campos de aquí a 2014-2015”.