Por Sebastián Vega M.
La masificación de teléfonos inteligentes abrió la posibilidad de que las personas utilicen sus propios dispositivos móviles como herramientas de trabajo, desplazando, en diversas ocasiones, al celular proporcionado por la empresa. Esta tendencia ha generado un fenómeno conocido como “consumerización”, concepto que permite el incremento de la productividad de los empleados debido a la conectividad permanente, pero que conlleva riesgos y desafíos.
“Las personas para su vida personal han ido adquiriendo teléfonos inteligentes y muchas veces tienen un equipo más moderno y poderoso que el que eventualmente le está pasando la empresa”, reconoce Carlos Teixedó, gerente general de Nubison, para luego añadir que esta orientación, que en inglés llaman “bring your own device” (trae tu propio dispositivo), tiene aspectos positivos que contribuyen decididamente al alza productiva.
“Por una parte tenemos una expresión social, donde las personas quieren usar su propio aparato, y por otro lado las aplicaciones móviles, generadas para apoyar funciones del negocio, que van a complementar el trabajo de cubrir desde el nivel operativo hasta el gerencial con esta nueva tecnología”, dice.
De acuerdo al ejecutivo, otro elemento es que “el costo (del equipo) lo paga el empleado, pues es él quien compra el dispositivo que quiere”. No obstante lo anterior, Teixidó advierte peligros en esta tendencia. “Los desafíos están en que las empresas también reconocen que aumenta el riesgo sobre la seguridad de la información y redes (...), además que produce un ambiente heterogéneo, con una mayor complejidad de administración”, argumenta, agregando que una solución a corto plazo es la implementación del HTML5, que limita el acceso a ciertas aplicaciones para minimizar el impacto en la productividad laboral.
Importancia del móvil
Según el Estudio de la Movilidad en las Empresas (EmE) 2012, desarrollado por Nubison en una muestra de 54 firmas, un 63% de ellas le asigna una alta importancia a la tecnología móvil, lo que sintetiza una posición común al momento de identificar objetivos. “Se busca la productividad personal, mejorar la comunicación y colaboración, agilizar la toma de decisiones, por lo que todos los factores más relevantes que vemos inciden directa o indirectamente en temas de productividad; tanto en el nivel personal, como la de los procesos de la empresa”, señala Teixidó. Con respecto a estrategias de movilidad a largo plazo, sólo un 26% de las compañías reconoce contar con un plan integral y a 24 meses.