El grupo industrial Honeywell ganó en
el primer trimestre del año US$397 millones, lo que supone
un descenso de 38% respecto al mismo periodo del
ejercicio anterior, que el fabricante aeronáutico atribuye a la
caída de la demanda de sus productos debido a la recesión económica.
La compañía estadounidense, que es la mayor productora mundial de
cuadros de mandos de aviones, aunque también fabrica desde
termostatos para edificios hasta turbocompresores para automóviles,
detalló hoy que su facturación entre los dos periodos comparados
descendió 14% y quedó en US$7.570 millones.
A través de un comunicado, Honeywell explicó que durante el
primer trimestre del año notó la caída de la demanda de algunos de
sus productos automovilísticos y de aviación especialmente, aunque
también se vio afectada por la debilidad del mercado inmobiliario
tanto en Estados Unidos como en otros países.
Ello afectó a sus cuentas del primer tramo del año, cuando el
resultado neto por acción atribuible al grupo, con sede en Nueva
Jersey, fue de 54 centavos por acción, frente a los 85 de hace un
año.
Honeywell, que lleva más de un año sumido en un agresivo plan de
reducción de costes, advirtió además de que estos problemas
continuarán durante el resto del año, por lo que rebajó su previsión
de ganancias para el conjunto de 2009 y la dejó entre US$2,85 y US$3,2
por acción.
"Los resultados del primer trimestre del año están en la línea de
lo que esperábamos", aseguró hoy el presidente y consejero delegado
de Honeywell, Dave Cote, quien añadió que se prevé "una primera
mitad de 2009 difícil, mientras continúen las lentas condiciones
económicas".