Transición energética: Gobierno se inclina por flexibilizar licitación de almacenamiento y acotar medidas en transmisión eléctrica priorizando las más urgentes

El 11 de octubre se selló el inicio de una nueva etapa que debiese culminar con el ingreso de una ley corta de estabilización de tarifas eléctricas al Congreso y la presentación de indicaciones al proyecto de transición energética para darle agilidad en su trámite legislativo. A través de un acuerdo alcanzado con senadores de la comisión de Minería y Energía y el Gobierno, ese día se comprometió constituir una mesa técnica para alcanzar los acuerdos que permitan un pronto despacho de este último articulado, cuyo trabajo ya comenzó y ha avanzado con relevantes ajustes en los tópicos más polémicos.

Tal como estaba previsto, la mesa técnica -que está dividida por ejes temáticos y que busca alcanzar mayor acuerdo en materias que serán parte de las indicaciones a presentar por el Gobierno en las próximas semanas- se constituyó el 16 de octubre. En todas las citas, las dos primeras realizadas en el Ministerio y la tercera en el Congreso, ha participado el ministro de Energía, Diego Pardow. Está integrada por asesores de parlamentarios; y nueve gremios que comprenden los segmentos de generación, distribución, transmisión y clientes. 

Entre los participantes, figura Daniel Salazar, exdirector ejecutivo del Coordinador Eléctrico Nacional y actual socio director de la empresa consultora energiE, quien participa en representación del senador Juan Luis Castro. Mientras, el senador Rafael Prohens fichó a Ramón Galaz, consultor de Valgesta. Eso sí, aunque no asume representación específica de algún parlamentario, también está en la mesa Sebastián Bernstein de Synex, apoyando a Libertad y Desarrollo.

Nueva fórmula para almacenamiento

Ese lunes 16 de octubre se inauguró la instancia abordando la licitación de sistema de almacenamiento de energía. El debate fue tal que incluso se debió realizar una nueva convocatoria extraordinaria el viernes de esa semana para continuar discutiendo esta materia. Según fuentes, el resultado fue un cambio sustancial respecto a lo planteado originalmente por el Gobierno. 

Aunque aún algunos no se atreven a hablar de pleno consenso en la fórmula y advierten que seguiría generando efectos, ya que participantes continuarían enviando insumos para debatir, consultados valoran que la propuesta presentada el viernes por el Gobierno contempló varios cambios propuestos el lunes por la instancia, alejándose de la idea original. Esto seguiría produciendo un cargo en la tarifa de los clientes, pero de menor cuantía.

Fuentes comentan que el punto de diferencia comenzaba en el diagnóstico en cuanto a la evolución del almacenamiento donde el Gobierno tendría una visión más pesimista que la industria en cuanto a la cantidad de proyectos de este tipo que estaban ingresando al sistema o evaluándose, considerando que no todos tienen además su financiamiento cerrado.

Con ese telón de fondo, y tras lo conversado, conocedores indican que el Gobierno optó por un mecanismo transitorio que permita evaluar esta evolución antes de la licitación del próximo año, por lo que si los privados aceleran la marcha en cuanto a sus iniciativas como proyectan podría no ser necesario realizar este proceso o ejecutarlo en un menor volumen.

En otras palabras, se inclinó por no perseverar obligadamente en una inversión de US$ 2 mil millones en dos sistemas de almacenamiento o de 2 GW. Y, por el contrario, reconocer lo que está en construcción. La idea es acordar una meta, descontando lo que ya está en construcción por los privados, y que así se evalúe si es necesario hacer la licitación o en qué envergadura.

Además, si bien en el proyecto original se asumía la realización de esta licitación por única vez, el Gobierno optó por dejar un mecanismo recurrente. Se está trabajando en un mecanismo recurrente que aterrice las metas que se tienen en la planificación de largo plazo para almacenamiento y de manera periódica esta óptica sea monitoreada por la Comisión Nacional de Energía (CNE) en un informe que contemple un proceso participativo.

En el caso del mecanismo recurrente, comentan fuentes, con la idea que esto esté precedido por un análisis de mercado de la CNE, considerando las metas de largo plazo y que este instrumento de la entidad estará sujeto a los mismos controles que operan en instrumentos similares. Por ejemplo, que sean participativos y que las discrepancias puedan ser llevadas al Panel de Expertos para evitar arbitrariedades, lo que actualmente no estaba consagrado en la redacción del texto.

En concreto, sería una licitación residual en cuanto a su cantidad y además residual respecto a su cobertura. Es decir, solo si el mercado avanza muy lento y solo si la demanda de los servicios de almacenamiento no es suficiente para cubrir la infraestructura se superaría el umbral mínimo. De esta manera, habrían condiciones que tendrían que ocurrir para que hubiese un costo traspasable a clientes.

Consultado por DF respecto a las conversaciones, Pardow comentó: "Recibimos una serie de observaciones por la industria que tenían que ver con que la política que implementáramos tenía que acelerar y no frenar el desarrollo privado de almacenamiento y en eso tuvimos convergencia, tuvimos un acuerdo en ese sentido, y también que el mecanismo tiene que tratar de limitar en lo posible el impacto a los clientes finales". En esa línea, añadió que sobre esos dos pilares "hemos ido trabajando en indicaciones que lo van a viabilizar".

Se acotarán medidas en transmisión

Este lunes se realizó la tercera reunión para abordar transmisión eléctrica y también hubo novedades. En este aspecto, el Gobierno habría sincerado la intención de priorizar medidas urgentes y dejar para una discusión posterior a la aprobación del proyecto otras acciones que estaban contenidas en el proyecto en esta materia respecto a planificación e institucionalidad. Así, el foco está en las obras atrasadas y abandonadas, y tener un mecanismo para las obras extraordinarios y urgentes que permite realizar inversiones de bajo monto pero que se justifican en términos de eficiencia.

En las próximas sesiones se espera tratar los ingresos tarifarios y los subsidios. En este último caso, si bien hay consenso de su necesidad, no lo hay en cuanto a su financiamiento. Al respecto, Pardow asegura que "la idea de esta mesa de trabajo hasta ahora ha sido muy productiva y hemos sido capaces de encontrar soluciones de consenso". "Espero que podamos encontrar una solución de consenso, pero incluso si así no fuera, con ponerle cierto borde a las conversaciones ya es suficiente. Es decir, ya se justifica este trabajo que estamos haciendo". 

En cuanto a los subsidios, Pardow cree necesario visibilizar el último informe del Consejo Fiscal Autónomo que -según recalca- "fue muy claro en decir que no hay espacio fiscal para más gastos permanentes". Según explicó, "una reforma estructural a los impuestos verdes, por ejemplo, es algo que va a tomar tiempo y podrían venir los ingresos permanentes para financiar un gasto permanente vía subsidio a consumidores vulnerables en las cuentas de la electricidad. El problema de eso es que los tiempos no acompañan a la premura con la que esto ocurre". 

"Lo que vamos a proponer son ajustes muy acotados a la estructura impositiva actual, acompañado de, con ese ajuste pequeño, el financiamiento de un subsidio que se viabiliza y que esto sea una institución que dure algunos años mientras damos la discusión más estructural de la reforma de impuestos, la reforma fiscal verde".

Proyecto de estabilización quedaría para noviembre

Si bien está programada para el 13 de noviembre la entrega de un informe a la comisión de Minería y Energía con los resultados de esta mesa técnica, conocedores de las conversaciones coinciden en que los plazos que se impuso para esta instancia podrían sufrir modificaciones debido a la complejidad de los temas en discusión, lo que podría obligar a nuevos encuentros para cerrar los temas analizados. 

Fuentes apuntan a que el proyecto de estabilización se ingresaría finalmente en noviembre y no en octubre, considerando que la próxima semana es distrital. Y así, posteriormente, se procedería al ingreso de las indicaciones del articulado de transición energética. Sobre esto, Pardow comentó: "Los plazos originales fueron establecidos de común acuerdo. Entonces, tengo que tener esa conversación (...) Soy consciente (de los plazos), pero hemos hecho muchos avances y eso es lo positivo. Se ha avanzado mucho en ambas mesas de trabajo".

De todas formas, el Ministerio de Energía ya está haciendo gestiones con la Cámara de Diputados para viabilizar el proyecto de estabilización cuando llegue a la comisión de Minería y Energía. Además, se acordó establecer una mesa de trabajo en la instancia.