Endesa se prepara para falla de BG en abril y contrata barco de GNL en mercado spot
Firma pactó un envío a precio de mercado -unos US$ 19,1 /MBtu-, 445% más que los US$ 3,5 /MMBtu que paga hoy.
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Por Miguel Bermeo Tapia
Sin contactos, ni reuniones, tampoco hay conversaciones ni mucho menos negociaciones. Así están las cosas entre Endesa Chile y British Gas. Las discusiones entre las compañías sobre la renegociación del precio del suministro de GNL no han sido fructíferas y hoy tienen a las dos gigantes parapetadas, cada una defendiendo su posición.
Así, cual tablero de ajedrez, la primera movida la dio la británica, que amenazó a Endesa con no poder entregar un barco de GNL en abril próximo, lo que es visto como una forma de presionar para llegar a acuerdo. Endesa, en tanto, puso en jaque la venta del 20% que le queda a BG en GNL Quintero –a la hispana Enagás en US$ 176 millones-, al ejercer una cláusula que impide la venta sin su consentimiento.
Mientras ambas se muestran los dientes, Endesa tomó medidas para evitar un descalabro. La firma ya contrató un barco de GNL que reemplace el que fallaría de BG. Según entendidos, la generadora no podía esperar hasta abril para ver si “era una amenaza o bravata lo de British Gas”, aseguran, así que ya contrató el servicio e incluso habría informado de ello, por el alza que tendrá el suministro y su impacto en el costo de la energía, al CDEC-SIC.
Sobrecosto de casi 500%
De hecho, el aumento en el costo es sustancial. Hoy Endesa, debido al cambio de contrato, está pagando
US$ 3,5 por millón de Btu y contratar un barco en el mercado spot, según el último informe de Platts, una consultora especializada en el tema, el valor de mercado está en US$ 19,1 /MMBtu. Es decir, un sobrecosto de 445% para Endesa por el GNL.
Así, si Endesa hoy paga en torno a US$ 10,5 millones por un barco típico de GNL –de 3 millones de Btu-, ha debido contratar otro barco por unos US$ 57 millones. Todo ello, sin considerar el costo de transporte ni el arancel aduanero del 6%.
Por lo mismo, al interior de la generadora ya estiman que tienen un caso para acudir el anunciado arbitraje contra BG, pues aunque el barco aún no ha fallado, la firma ya ha incurrido en costos reclamables debido a esa amenaza, pues ha debido salir a reemplazar ese barco y no esperar hasta abril.
Así, fuentes del proceso aseguran que el arbitraje es una decisión tomada. De hecho se espera que a más tardar marzo o abril hayan demandado a la británica, aunque podría ser antes.
Lo que ofrece BG
Mientras, Endesa sigue firme en su posición de no aceptar los términos que propone hoy BG para renegociar el contrato de suministro de GNL, pues considera que las nuevas condiciones están bajo el mercado y existen riesgos, basados en el actuar actual de la británica, de que se repita el mismo escenario en unos años. Un dato no menor, es que el precio de largo plazo del GNL estaría en torno a los US$ 15 /MMBtu.
Para la generadora despierta suspicacias que BG ofrezca subir el precio desde US$ 3,5 /MMBtu a US$ 8 /MMBtu, y vender un 50% de GNL adicional a lo que tienen contratado a un precio en torno a los US$ 11 /MMBtu, lo que ya aceptaron Metrogas y Enap. La gran duda es qué pasará si los precios siguen cayendo por el shale gas y BG decida que los contratos no son convenientes.
El impacto
Además, para la generadora los términos no son convenientes, pues el cambio de contrato –desde US$ 3,5 /MMBtu a US$ 8 /MMBtu- significaría un sobre costo de US$ 400 millones, a valor presente, por todo lo que queda de vida del acuerdo. Misma cifra, explican en la industria, sería el golpe para Enap y Metrogas.
Lo que ofrece BG, estiman cercanos, es mucho más caro para Endesa que fallar sólo un barco al año. Los acuerdos que cerraron Enap y Metrogas equivalen como a tres barcos fallados al año. Por ello, la generadora piensa que si no hay avances y todos los años falla sólo un barco, es mucho mejor que lo que cerraron con Enap y Metrogas. El cálculo es que tendrían que fallar tres barcos para que fuera parecido al sobre costo del contrato.
La duda, entonces, es por qué Metrogas y Enap aceptaron los nuevos términos. Según un cercano a las negociaciones, fue por el temor a quedar sin suministro, aunque el menor golpe es para la distribuidora de gas, pues puede traspasar el cambio de precio del contrato a los clientes.
En todo caso, en la industria rescatan un punto importante que habrían conseguido en la negociación: la cláusula que decía que el GNL provenía de Egipto -de donde BG acusa tiene dificultades- y ahora, en cambio, sería desde Trinidad y Tobago, por lo que ya no podría acusar problemas de suministro para no enviar algún barco.