“El directorio ha revisado y analizado la respuesta de la SVS y ha acordado un plan contemplando el plazo establecido por el regulador”.
Con esta frase Enersis Américas se refirió al resultado de la sesión de ayer de su mesa directiva, ocasión en la que se revisó la negativa de la Superintendencia de valores y Seguros (SVS) para prorrogar de 90 a 120 días la vigencia máxima que deben tener los Estados Financieros al momento de realizarse la junta de accionistas que votará la fusión de esta firma con Endesa y Chilectra Américas, lo que marcará la fase final de la reorganización del negocio de la italiana Enel en la región.
Aunque no hubo confirmación oficial, trascendió que tal como se esperaba, el plan que definió esta mesa y que se replicó aguas abajo en las otras dos sociedades Américas, fue revisar el cronograma de trabajo de los peritos, evaluadores financieros y legales y de los comités de directores, que derivará en la recomendación respecto de la conveniencia de unir estas empresas.
La otra decisión que se adoptó fue utilizar balances posteriores al 31 de mayo, que se evaluó inicialmente, aunque no fue posible establecer si serían los de junio u otro mes. Esto se conocerá al momento de que se cite a la junta, lo que debe suceder con al menos 45 días de anticipación a la asamblea.
Más allá de la situación a nivel local, la preocupación en los directorios está en Estados Unidos, ya que la información que exige la SEC es más profunda, dicen las fuentes, por lo que el informe F4 que tienen que entregar en el marco de la fusión, aún está en elaboración y eso justifica el plazo adicional de 30 días que se pidió al organismo público y que éste negó.
Fuentes del directorio de una de las empresas que Enel propone fusionar comentaron que analizados todos los escenarios legales, el utilizar EEFF posteriores no supondría un problema, considerando que el análisis de la operación siguió avanzando, esto porque las variaciones más significativas en la información ya se produjeron.
El trabajo más complejo, dijeron, era actualizar los datos del grupo y las empresas desde diciembre de 2015, cuando se aprobó la división de los negocios regionales de Chile, y el momento actual, incorporando, por ejemplo, las nuevas perspectivas para las operaciones en Argentina y Perú. Esta revisión ya se completó, ya que el trabajo no se suspendió a la espera de la respuesta de la SVS.