Aguas Pacífico planea invertir US$ 280 millones para modificar y ampliar su planta desalinizadora en Puchuncaví

En un movimiento clave para la Región de Valparaíso, Aguas Pacífico -empresa impulsada por el fondo brasileño Patria Investments- ingresó un Estudio de Impacto Ambiental (EIA) al Sistema de Evaluación Ambiental (SEA), con el objetivo de modificar su Proyecto Aconcagua, la planta desalinizadora multipropósito ubicada en la bahía de Quintero, Puchuncaví. 

Con esta modificación, que contempla una inversión de US$ 280 millones, Aguas Pacífico busca ampliar la planta desalinizadora aprovechando la infraestructura que actualmente está en construcción, incorporando cuatro modificaciones al proyecto. Así, el objetivo es aumentar su capacidad de producción en 1.000 litros por segundo adicionales de agua para la zona central del país.

“En un contexto en que se mantiene la sequía estructural en la zona central del país, los nuevos recursos hídricos que producirá la planta desaladora de Aguas Pacífico constituyen un aporte a establecer condiciones de seguridad hídrica para la Región de Valparaíso y en un soporte para el abastecimiento de las comunidades y actividades industriales, lo que se traduce en mejoramiento de la calidad de vida y oportunidades de desarrollo, gracias al sustento estable y seguro de agua”, indicó la empresa.

Entre las principales modificaciones del proyecto destaca la construcción de una nueva unidad desaladora dentro del mismo terreno donde se está levantando la planta original. Además, se ajustarán las infraestructuras relacionadas con el inmisario y emisario submarino, elementos fundamentales para la captación y distribución del agua de mar, sin alterar su ubicación ni afectar el entorno marino. 

Finalmente, la empresa espera reforzar y cambiar las bombas de impulsión para generar mayor potencia que permita trasladar más agua por los mismos ductos desde la sentina a la planta desalinizadora, y desde la planta hasta Quillota.

“Esta nueva iniciativa es una oportunidad para la región, ya que con sólo cuatro modificaciones al Proyecto Aconcagua actualmente en construcción, se podrá producir 1.000 litros por segundo adicionales de agua desalinizada, permitiendo disponer de esta fuente de agua segura y sostenible para las personas y empresas de la región”, explicó el gerente general de Aguas Pacífico, Javier Moreno Hueyo.

Si aprueba el EIA, se estima que la construcción de estas modificaciones comenzará alrededor del año 2027. Esta fase se extendería por un período de tres a cuatro años, durante el cual se contratarían más de 400 trabajadores, con la proyección de iniciar operaciones en 2030.

Etapas previas

La empresa indicó que entre el 5 de noviembre y el 11 de diciembre de 2024 realizaron varias instancias de participación a las que asistieron más de 1.000 personas de Puchuncaví y Quintero para dar a conocer el proyecto y sus alcances. Durante el proceso se recibieron 134 consultas y observaciones.

A partir de ese proceso de Participación Ciudadana Temprana, la empresa explicó que incorporó en el EIA una serie de compromisos ambientales voluntarios. Estos incluyen el suministro de agua desalinizada en la zona mediante alianzas con los sistemas de Agua Potable Rural de Quintero y Puchuncaví, la contratación de mano de obra y servicios locales, la creación de un fondo de desarrollo local destinado a financiar proyectos para mejorar la calidad de vida de las comunidades, y la implementación de una plataforma de monitoreo en línea, accesible al público, para velar por el cuidado de la bahía.