El aumento de los salarios en América Latina ha sido bajo,
pese al crecimiento económico de la región, anotando un promedio de 0,3% al
año, según el Informe Mundial sobre Salarios 2008-2009 dado a conocer hoy por la Organización
Internacional del Trabajo (OIT).
En Chile, el aumento de los salarios alcanza un 1% al año, ubicándose en el
rango superior de alzas en la región, junto con México, Perú y Venezuela. Sólo en el caso de
Honduras hubo un incremento importante de 2,9% al año.
El especialista en Políticas de Mercado e Instituciones Laborales de la OIT, Andrés Marinakis,
señaló que Chile es uno de los países que anotaron alto crecimiento y baja inflación
en los últimos años, sin embargo, los salarios no crecieron a la par. "Hay
una deuda en ese sentido, por lo tanto, si se pide moderación salarial es
importante que haya una contrapartida", afirmó.
Marinakis indicó que este bajo crecimiento de los salarios se ve afectado principalmente por una baja cobertura de la negociación colectiva en el país y en la región, y destacó la importancia del diálogo entre empleadores y trabajadores, especialmente en momentos de crisis económica. "Si no hay esa negociación, ciertamente el ajuste va a ser mucho más crudo", indicó.
"Creemos que es importante que las empresas tengan esta posibilidad de negociar con sus trabajadores fórmulas que les permitan enfrentar mejor este momento de crisis y que también sea una oportunidad para enfrentar las bases de cómo van a enfrentar el crecimiento económico futuro, porque en momentos de crisis el ajuste se da en forma obligatoria, pero en momentos de crecimiento entendemos que no se está dando suficiente participación del lado de los trabajadores", dijo.
Flexibilidad laboral y salario mínimo
Marinakis rechazó que sea un buen momento para evaluar implementar la flexibilidad laboral. "No es un momento en el que uno deba promover el despido, porque en realidad la flexibilidad laboral muchos la resumen a bajar los costos del despido", afirmó. "Eso es todo lo contrario a lo que recomienda la situación", dijo el especialista.
Además instó a los gobiernos latinoamericanos a mantener el poder adquisitivo del salario mínimo. "Eso no quiere decir que estemos llamando a aumentos significativos reales del salario mínimo, más bien estamos llamando a mantener el poder adquisitivo que recuperaron los salarios mínimos en los últimos años. Entendemos que entrar a un periodo de crisis no es un momento para políticas salariales agresivas, por el contrario, tienen que ser moderadas", recalcó.