La Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económico (OCDE), anticipó un crecimiento de apenas 2,6% para Chile el próximo
año y 3,1% en 2010.
"(Chile) debería recuperarse en el 2010 a medida que sus
mercados de exportación comienzan a recuperarse y se moderan las turbulencias
financieras globales", dijo la OCDE en informe semestral de perspectivas.
La entidad reúne a los países más industrializados del
planeta dijo que la caída en el precio de los commodities y las presiones
inflacionarias –debido a la depreciación de sus monedas- figuran como los principales
riesgos para países emergentes como Chile y también México y Brasil en la región.
En ese contexto, la entidad estimó un crecimiento de 3,9% para
este año.
"Las economías emergentes grandes verán una mayor
desaceleración en la actividad, reflejando una demanda débil en el área de la
OCDE, una reevaluación de los riesgos financieros y los efectos rezagados de
las respuestas previas para enfrentar las presiones inflacionarias", agregó
la entidad.
Sin embrago, los efectos de la crisis se dejarán sentir con
más fuerza precisamente en los países más desarrollados.
Para la entidad, la recesión en los países de la
Organización se prolongará hasta mediados de 2009 y esta situación, sin
precedentes desde hace casi treinta años, no permitirá una recuperación de la
economía hasta la segunda mitad de 2010.
En ese contexto, prevé una reducción de su Producto Interno
Bruto (PIB) del 0,4%, una décima peor de lo que calculaba hace sólo doce días,
debido a un previsible deterioro en la zona del euro.
Los 30 estados miembros del "Club de los países
desarrollados" entraron en recesión en el tercer trimestre de 2008, con
una caída de su PIB del 0,2%, que se agravará en el trimestre actual hasta el
-1,4%, y continuará en los dos siguientes (-0,8% y -0,2%).
Estas cifras, como la del crecimiento de sólo el 1,3% este
año, hacen que la OCDE insista en que España tiene que esforzarse en hacer más
competitivos sus mercados de productos y servicios para incrementar su
productividad.
En el conjunto de la OCDE, la organización estima que aunque
el crecimiento será ligeramente positivo en la segunda mitad de 2009 (0,5% en
el tercer trimestre y 1,1% en el cuarto), la producción en ese semestre seguirá
siendo inferior al del mismo periodo del actual ejercicio.
Para la recuperación habrá que esperar a 2010, cuando se
espera una progresión de la actividad del 1,5%, según la organización.
Los autores del estudio advierten de que la crisis será
particularmente pronunciada en una serie de países muy expuestos al brusco
cambio de tendencia del mercado inmobiliario, como España, Irlanda, el Reino
Unido o Estados Unidos, o a la tormenta financiera, como Hungría y Turquía.