Bárbara Figueroa y el legado de Alfonso Swett: “Él tenía esta particularidad de comprender la potencia que tenía un diálogo entre iguales”

El 10 de abril de 2018 la sede de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) fue sede de un hito histórico. Por primera vez, en la historia de la Central, el gran empresariado se trasladó hasta la sede de los trabajadores, ubicada en avenida Libertador Bernardo O`Higgins 1346, para sostener una reunión con los principales dirigentes sindicales del país.

El hito dejó una imagen para la historia, Alfonso Swett y Bárbara Figueroa -los entonces timoneles de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) y de la CUT, respectivamente- sentados en una misma mesa acompañados del gerente general de la multigremial, Fernando Alvear; y los entonces presidentes de la Abif, Segismundo Schulin-Zeuthen; el secretario general de Sofofa, Jorge Ortúzar; el presidente de la CNC, Manuel Melero, el titular de la CChC, Sergio Torretti, el titular de la SNA, Ricardo Ariztia y Felipe Purcell, director Sonami. 

Y si bien esa reunión marcó un hito, la verdad es que la relación entre Swett y Figueroa era de larga data, y así lo recuerda la hoy secretaria general del Partido Comunista, quien lamenta con profundo pesar el fallecimiento del exdirigente gremial.

“Alfonso fue una persona muy llana, siempre muy franca, pero muy fraterna, siempre muy cálido en el trato cotidiano, muy respetuoso. Yo tengo los mejores recuerdos de Alfonso, de su calidad humana”, comienza relatando Figueroa.

La buena relación entre Swett y el mundo sindical nació bastante antes de aquel histórico encuentro en la sede de la multisindical. El empresario habría tenido un primer acercamiento a los trabajadores en 2010, cuando el entonces Gobierno conformó una comisión para definir el salario mínimo con la CUT y otros actores, y en la cual Swett participó como asesor de los empresarios. 

Su rol en dicha instancia fue lo que lo puso en la lupa de Figueroa, quien al asumir el liderazgo de los trabajadores en octubre de 2012 lo contactó, dando origen a una estrecha relación.

Cuando Swett asumió el liderazgo de la CPC en 2018, le tocó tener a Figueroa como contraparte como representante de los trabajadores, y si bien a ambos les tocaba representar a sectores muy distintos, Figueroa destaca y enfatiza que los intercambios de opiniones siempre fueron con respecto, y que la postura de Swett fue siempre la de buscar un acuerdo y puntos en común.

“Algo que uno podría decir que marca un sello de lo que fue la gestión de Alfonso, es que él tenía esta particularidad de comprender la potencia que tenía un diálogo entre iguales cuando se trataba de poner el tema del mundo del trabajo. Él transmitió una señal muy potente como presidente de la CPC cuando asiste a la CUT con la plana mayor de todos los dirigentes de los gremios, precisamente para transmitir que era importante que los actores del mundo del trabajo dialogáramos de manera directa”, relata Figueroa.

De hecho, la dirigenta del PC destaca el interés que mostró Swett por debatir diversos temas laborales que iban más allá de la contingencia de la época. “En esa visita a la CUT hablamos de diversos temas, que no sólo tenían que ver con derechos laborales colectivos que son los temas más candentes, sino que también respecto de materias como seguridad y salud en el trabajo, formación laboral, es decir, aspectos también vinculados al mundo del trabajo del día a día. Era una agenda con la CPC en ese periodo muy nutrida de otros aspectos”, destaca Figueroa.

Para la exembajadora de Chile en Argentina, este y otros hitos reflejan que Swett siempre destacó por escuchar a sus contrapartes. “No era solo sentarse a conversar, Alfonso tenía una disposición muy genuina a tratar de cautivarse con los argumentos, de tratar de recoger lo que uno pudiera plantear desde las propuestas y las posiciones aunque fueran distintas. Había siempre una disposición de entendernos, de tratar de contribuir, de colaborarnos y por sobre todas las cosas, de tratarnos como iguales”, destaca Figueroa.

"Teníamos la esperanza de que el descenlace de Alfonso fuera otro. Así que lo primero es manifestarle nuestro pesar a su familia, sus amigos, sus cercanos, al mundo empresarial.  Nosotros siempre vamos a destacar el positivo diálogo que sostuvimos, de respeto mutuo", concluye Figueroa.