La Fiscalía Nacional
Económica (FNE) anunció hoy que decidió iniciar una investigación acerca de lo
que está ocurriendo con la cadena trigo-harina-pan, tras la denuncia presentada
por el Ministerio de Agricultura el pasado 19 de enero relativa a la existencia
de eventuales irregularidades en el proceso de formación de los precios en la
mencionada cadena.
Mediante un oficio firmado por el fiscal nacional (S), Jaime Barahona, la FNE señaló que consideró "la
particular evolución del precio de la harina y su falta de correlato con los
cambios en el precio del trigo y del pan", lo cual, "podría ser resultado de la
ejecución de prácticas anticompetitivas".
Al respecto, la ministra de Agricultura, Marigen Hornkohl, expresó su
satisfacción por la decisión de la
FNE, "cuya determinación de investigar por qué la baja en los
precios del trigo no han sido traspasados a los consumidores da cuenta de la
solidez y seriedad de los antecedentes presentados por nuestro Ministerio para
solicitar el inicio de una investigación".
"Hemos adoptado una posición seria y responsable, en el marco de nuestro deber
de velar por los derechos de los consumidores y la transparencia del mercado. Y
la Fiscalía Nacional
Económica, al recoger nuestro planteamiento, ha señalado que hemos seguido el
camino correcto. Algo está pasando con el precio del pan y eso debe ser motivo
de una investigación", explicó la secretaria de Estado.
Indicó que el Minagri entregó antecedentes a la FNE que fueron aportados por los equipos
ministeriales, que trabajaron en conjunto con la Fiscalía, y también por la Federación Chilena
de Panaderos (Fechipan).
La presentación del Minagri indicó que, hace algunos meses, el precio del
quintal de harina se transaba entre $ 24 mil y $ 25 mil, lo que se tradujo en
un alza en el precio del kilo de pan.
En la actualidad, los precios del quintal de harina han bajado y se transan
entre los $ 14 y los $ 16 mil, descenso que se suma a la baja en los precios
del petróleo, los insumos y los commodities.
Marigen Hornkohl, explicó que "estas rebajas, que sí han sido traspasadas a los
productores de trigo, que están recibiendo un promedio de $ 10 mil menos por
quintal, no han llegado a los consumidores, que siguen pagando el precio que el
pan alcanzó tras el encarecimiento de la harina".