Las fuertes declaraciones de la ex abanderada presidencial de la Alianza, Evelyn Matthei, en contra del gobierno y la presidenta Michelle Bachelet provocaron un efecto más perdurable, pero menos público, en su propio sector que en la Nueva Mayoría. Ello, porque desde Renovación Nacional ponen en duda que la forma como sus socios decidieron hacer oposición de aquí en adelante tenga un efecto beneficioso para el país y contrastan la forma dialogante en que la tienda encabezada por el diputado Cristián Monckeberg ha logrado generar acuerdos con la actual administración. Se trata de un escenario en el que resurge la histórica disputa por la hegemonía del sector.
"¿De qué sirve oponerse a todo? De nada. Más que para marcar un voto duro y por ahí no más. Yo creo que el oponerse a todo tiene que venir con un apellido. Oponerse para conversar; oponerse para mejorar la marcha del país; oponerse para buscar acuerdos que favorezcan a la ciudadanía. Ese es el sentido de Renovación Nacional y vamos a seguir insistiendo en ello", enfatizó Monckeberg ayer en el marco de una conferencia de prensa y en alusión a la manera como han actuado sus socios de pacto, en estas últimas semanas
De hecho, las primeras manifestaciones de incomodidad de RN fueron justamente al tomar distancia de la forma como la ex presidenciable del sector criticó -y lo ha seguido haciendo- la forma cómo el actual gobierno está desarrollando su gestión. Aunque no discrepan del fondo, que sí comparten con sus aliados.
El fantasma de la hegemonía
Con la arremetida de la UDI, que además expresó su convicción de que es el partido llamado a ser "un dique de contención" frente a las reformas impulsadas por el gobierno, en la casona de Antonio Varas comenzó a cobrar fuerza una antigua controversia al interior de la derecha en la que históricamente se ha impuesto el gremialismo: la lucha por la hegemonía del sector. En Renovación sospechan que eso apuntan sus aliados, pese a que no creen que ello les reditúe políticamente.
En ese sentido un antiguo dirigente de RN no duda en admitir que lo que perciben en la tienda es que sus socios quieren avanzar en la línea de "imponer una estrategia que ya no dio resultado en otros tiempos". Mientras que un alto representante del partido interpreta la asonada gremialista como una fórmula para atraer más electorado, pese a que tiene la convicción de que "con esta posición intransigente de decir a todo que no, lo único que consigue la UDI es mantener el 25% que ya tiene. Así no crece hacia el centro".
Por lo mismo, tanto el timonel de RN como su secretario general, Mario Desbordes, insisten en diferenciarse de sus aliados, sacando a colación que ha habido ocasiones en que su estrategia le ha dado dividentos a RN, como en el caso de la reforma tributaria en que la UDI terminó sumándose. Por lo que insistieron en que "somos una oposición dispuesta a dialogar, a conversar en cada caso, con buen criterio. Oponerse con alternativas, es un tema fundamental. Oponerse sin proponer algo distinto no tiene mucho sentido y va desvalorizando la política".
En este contexto, Desbordes fue enfático en señalar que "el rol que le toca a la oposición" es el de construir propuestas en torno a materias en las que no hay acuerdo y tratar de conseguir respaldo para ellas.
Binominal entra en tierra derecha
Este viernes 5 de diciembre vence el plazo para introducirle indicaciones en el Senado al proyecto que cambia el sistema binominal. Es por ello que RN, en el marco de la oposición dialogante que dice practicar, está elaborando un conjunto de medidas con las que apuesta alcanzar un acuerdo con el gobierno.
Si bien en ello están trabajando con la UDI, para tratar de congeniar posturas comunes, en Renovación están convencidos que se podría avanzar en una fórmula que ya antes había encontrado acogida -dicen- en el gremialismo y que, en su momento, fue bautizada como la propuesta Duval-Tagle.
En el partido se comenta que este diseño es el que más le acomoda a sus autoridades, ya que mantiene la fórmula del gobierno de 155 diputados y 50 senadores, pero con el alcance de que 11 de las 15 circunscripciones mantendrían sus carácter binominal, mientras que sólo en las cuatro restantes se rompería el mecanismo electoral.
En el trabajo que realizan ambos partidos también se consideró la propuesta que se presentó durante el gobierno de Sebastián Piñera, pero se habría descartado, porque choca con la intención del senador UDI Hernán Larraín de recurrir al Tribunal Constitucional por la propuesta de la actual administración, pues a su juicio la Cámara no responde a la proporcionalidad del voto, pero -comentan en RN- el Mensaje del ex presidente incurre en el mismo error "es muy desproporcional, entonces Larraín se pisaría la cola" con su reclamo, advierten.