La ingeniera en biotecnología de la Universidad Andrés Bello y experta en innovación abierta, Francisca Contreras, es la nueva directora ejecutiva de startuplab.01, la iniciativa que Corfo y Fundación Chile (FCh) lanzaron en mayo pasado bajo el nombre de Startup Campus y que a partir de esta semana entra en tierra derecha.
La ejecutiva, quien ha forjado su carrera en torno a la innovación y el emprendimiento, llega con nuevos bríos para liderar la entidad público privada que busca albergar 200 startups de base científica tecnológica en cinco años y que contará con US$ 10 millones de financiamiento del Estado.
En su primera entrevista en este nuevo cargo, entregó sus primeras definiciones y habló del trabajo que viene por delante.
“Startuplab.01 es varias cosas. Me gusta decir que es un hub de innovación, pero también un ecosistema, una comunidad y un lugar de encuentro”.
“Startuplab.01 es varias cosas. Me gusta decir que es un hub de innovación, pero también un ecosistema, una comunidad y un lugar de encuentro. Pero lo más importante es que se trata de un espacio de validación tecnológica para los emprendimientos”, dijo.
Contreras conoce de cerca el mundo de las startups de base científico tecnológica. Durante tres años fue research & development manager de la biotecnológica Phage Lab y luego, confundó BioExplora.
En 2017 aterrizó en la Fundación Chile, donde ejerció diversos roles -el último Corporate Business Associate de ChileGlobalVentures-, lo que le permitió participar en la génesis del proyecto. Integró el equipo que viajó a Estados Unidos para nutrirse de ideas y asumió la dirección interina, cargo en que fue ratificada hace dos semanas tras ganar un proceso a cargo de una consultora externa a FCh.
Durante estos meses se centró en tareas administrativas, como formar el equipo. Hoy son cuatro: Vicente Pavani (líder de startups y programas), Valy Cummings (líder de alianzas y comunidad), Alma Rates (líder de marketing y comunicación) y Contreras.
Nueva marca
El cambio de marca apunta a dar un relato y propósito a la iniciativa, para lo cual contrataron a la agencia Ahora, con experiencia en el tema y en startups.
“El propósito es conectar a startuplab.01 con una visión de un futuro esperanzadora, brillante y pensando en cambio climático bajo una mirada optimista basado en ciencia y tecnología, porque siempre lo vemos desde un punto de vista negativo”, comentó.
En la elección del nombre también se consideró el factor distintivo que está en la implementación de laboratorios. “Esto no es un cowork o edificio, sino que espacios de validación de tecnología para emprendedores”, dijo Contreras.
También hay avances en la remodelación del recinto ubicado en Santa Rosa 76 en Santiago, la que está cargo de Territoria. Se está trabajando en mejorar las áreas comunes y en la construcción de un auditorio.
Contreras comentó que habilitaron un cuestionario para determinar qué capacidades requieren los emprendedores para diseñar y comprar los equipos de los laboratorios.
Además, ya tienen a dos socios fundadores, BancoEstado, el primero en entrar, y BID Lab, los que ocuparán un espacio en el edificio.
“Se suman porque están súper interesados en seguir apoyando al ecosistema de startups. Tienen su banca de financiamiento y quieren entrar a generar instrumentos de deuda para emprendedores de base científica”, dijo.
El BID Lab es el brazo de innovación y capital emprendedor del Grupo Banco Interamericano de Desarrollo, quienes aportarán US$ 1,5 millones. “Tienen mucho foco y preocupación por todo el tema de cambio climático y de apoyar al desarrollo de ecosistemas y emprendimientos”.
Contreras señaló que el modelo de socios es clave para la sostenibilidad financiera. “Cuando vaya disminuyendo el financiamiento público tenemos que ir asegurando el privado”.
También cerraron una alianza con Thermo Fisher, que proveerá equipos de laboratorio e infraestructura bajo un modelo de “comodato y arriendos más baratos”.
Cerrar brechas
Contreras explicó que startuplab.01 nace para abordar las brechas que tienen las empresas emergentes de base científicas, como el financiamiento, infraestructura, acceso a espacios de validación tecnológica y capacidades de negocio.
“Pero también desde el convencimiento de que frente a los desafíos ligados al cambio climático los únicos que van a poder ayudarnos a resolverlos son este tipo de compañías. La idea es entregarles la infraestructura, conexiones y habilidades en un mismo lugar”, afirmó Contreras.
Si bien el foco está puesto en startups chilenas, está abierto a Latinoamérica “y que veamos a Chile como un polo en la región”.
Comentó que el primer desafío es abrir las puertas de startuplab.01, lo que se proyecta para junio de 2025. Ya trabajan en la oferta programática para las primeras startups que lleguen, como levantamiento de capital, bootcamps (programas de capacitación intensivos) hasta aceleración, escalamiento e internacionalización.
En marzo abrirán una convocatoria para recibir a las 30 primeras startups con prueba de concepto e hipótesis validada. Y en junio se sumarán los corporativos, para lo que trabajan en un modelo de membresía.
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