María José Montero: “Hoy existe más conciencia sobre la importancia de entender, medir y reportar el impacto de las inversiones”

Los fondos de impacto buscan generar rentabilidad financiera, pero también un impacto social o ambiental medible, explica María José Montero, directora titular de la Asociación Chilena de Administradoras de Fondos de Inversión (Acafi). Buscan acercar el mundo de la filantropía con la industria financiera tradicional, la rentabilidad y el crecimiento que generan, detalla.

Estos instrumentos han capturado el interés de los inversionistas. “En los últimos tres años las inversiones pasaron de US$ 138 millones a US$ 390 millones, pero hay espacio para que sigan creciendo”. Además, en Chile hay siete administradores de fondos que ofrecen invertir en estos activos.

Desde 2019 la Acafi ha promovido la inversión de impacto y la inversión sostenible basada en principios ESG -gobierno ambiental, social y corporativo-. “Hoy existe más conciencia sobre la importancia de entender, medir y reportar el impacto social y/o medioambiental de las inversiones”.

Agrega que el mayor desafío está en crear métricas, estándares y normativas para hacer comparaciones adecuadas.

• Un libro que sugiere es Impact: Reshaping Capitalism to Drive Real Change de Sir Ronald Cohen, “porque el autor es uno de los impulsores de la inversión de impacto en el mundo y plasma bien los conceptos que hay detrás de estas inversiones”.
• También recomienda La Revolución Reflexiva de Ximena Dávila y Humberto Maturana, ya que toca un tema de fondo de las inversiones de impacto: los cambios personales, la forma en que construimos la sociedad y el rol del sector privado.

• Utiliza la metodología de gestión de impacto de FIS Ameris que toma como referencia el Impact Measurement & Management de The Global Impact Investing Network (GIIN), para evaluar de manera interna los resultados socioambientales de cada institución y la lógica riesgo-retorno-impacto. Además se realiza anualmente una evaluación externa por la empresa Sistema B.
• En la evaluación interna se vinculan los objetivos de impacto de las instituciones a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU. Esto logra que el trabajo se pueda medir bajo indicadores del Informe de Impacto y Estándares de Inversión (IRIS) e IRIS+.
• También sigue el aporte de las empresas a la igualdad de género, en base a las recomendaciones del BID.