Tras el revuelo que generó su saludo a Chile a fines de noviembre vía Twitter, Spotify inició formalmente hoy su popular servicio de música por streaming en el país.
En medio de su agresiva expansión por el mundo y la región, la titular de asociaciones estratégicas para Latinoamérica de la compañía sueca, Mia Nygre, dijo a Diario Financiero que tienen altas expectativas para Chile dada la penetración de los aparatos móviles.
“Para nosotros, el mercado chileno es uno de los más importantes a nivel latinoamericano, dado el alto porcentaje de personas con smartphones”, comentó la ejecutiva, quien detalló además que el servicio pagado tendrá un costo de $ 3.099 al mes.
Respecto a la negociación y acuerdos con los sellos discográficos, Nygre reveló que el modelo consiste en el pago de un 70% de sus ingresos a los titulares de derechos. “Nos tomamos muy en serio los pagos a los artistas y desde nuestro lanzamiento hemos pagado más de US$ 1.000 millones en derechos a los propietarios de derechos”, detalló.
Nueva era musical
Spotify junto con Grooveshark, rara, WiMP y Deezer (esta última también presente en Chile) son parte de una nueva camada de empresas nacidas al alero de la industria discográfica que ha sufrido con las descargas ilegales.
Según un estudio de la Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI, por sus siglas en inglés) los modelos de suscripción se han insertado con enorme éxito en algunos mercados, en particular en Escandinavia. En Suecia, por ejemplo, los servicios por suscripción fueron responsables del 84% de los ingresos del sector digital en los primeros once meses de 2011, en gran medida gracias a Spotify que ya opera en 55 países del mundo. Otros mercados también han registrado un marcado crecimiento en sus ingresos. Tal es el caso de Francia, que tuvo un aumento de más del 90% durante los primeros once meses de 2011 (SNEP).
Los servicios de música por suscripción están experimentando una rápida expansión. De acuerdo a IFPI, los servicios de streaming por suscripción y financiados por publicidad ya representan el 20% de los ingresos digitales a nivel mundial, con un incremento del 14% respecto de 2011.
“Hemos tenido una tasa de conversión de más del 20% en nuestro servicio de suscripción Spotify Premium. Es realmente inaudito. Muchos ni siquiera pensaban que llegaríamos a conseguir la mitad de esa tasa de conversión. En nuestros cinco años de experiencia hemos visto que cuanto más expuesta está la gente a más volumen de música (de la forma que quieran), más probable es que vuelvan a pagar por la música”, comentó Nygre.
En ese contexto, Spotify estima que con un acceso gratuito y legal a la música, más gente la escuchará y, por ende, habrán más potenciales interesados en querer pagar por el servicio. “Cuanta más música se escuche más gente se pasará a Premium”, sostuvo.