Todo lo que esté relacionado con la operación de la Unidad de Análisis Financiero (UAF) es completamente confidencial. Tanto, que si alguien divulga públicamente el envío de información a esta agencia -encargada de prevenir y detectar el lavado de activos-, y aunque no dé a conocer el contenido, arriesga ser demandado en tribunales.
Después de todo, detrás del lavado de activos está el narcotráfico, financiamiento del terrorismo, fraudes, entre otros delitos.
Y según comenta Víctor Ossa, primer director de la UAF, el caso de AC Inversions y otras firmas similares, dejó al descubierto una serie de falencias graves en los procesos que se siguen.
-Si los bancos hubieran presentado los reportes a la UAF, ¿qué falló?
-No tengo información de si reportaron o no, porque está penado por ley si se divulgan esos antecedentes. Pero lo importante es saber qué reportaron, porque se actúa con la información que se recibe. Ahora, en este caso, el asunto es tan evidente, burdo, que, en mi opinión, con muy poca información se deberían haber encendido todas las alarmas.
Porque si alguien me dice que me paga 5% mensual por un depósito, es para alarmarse de inmediato; algo raro tiene que estar ocurriendo
-¿Y los movimiento de cuentas?
-Claro, por eso creo que los bancos debieron sí o sí reportar. Si no lo reportaron, están en un problema. Ahora, si lo hicieron, estamos frente a otro problema, porque este caso es demasiado evidente.
Cuando era director de la UAF a veces recibíamos reportes que eran tan obvios que en un plazo entre 24 horas a 48 horas despachábamos al Ministerio Público, sin perjuicio de que nosotros siguiéramos investigando. Pero alertábamos inmediatamente a la Fiscalía, porque ellos tienen herramientas más intrusivas.
-¿Qué es lo más relevante del perfeccionamiento de la ley que se hizo en 2015?
-Lo más importante es que se agregaron delitos precedentes. Porque si esto (AC Inversions) hubiera ocurrido cinco o diez años atrás, no habrían sido perseguidos por lavado de activos, porque la estafa no estaba dentro de esa categoría.
-Deben recibir cientos de reportes al día, ¿cómo priorizan?, ¿por monto?
-Hay reportes que son obligatorios, sobre US$ 10 mil en efectivo. Pero por otro lado, la sospecha es independiente del monto, va en el tipo de operación.
-¿Este caso marca un hito?
-Es que es sorprendente, porque ya tuvimos un caso antes, el de los quesitos, que al final era el mismo esquema piramidal. Entonces tenemos, por un lado, un grupo de gente muy fresca, con conductas delictuales, y por otro, una tropa de gente que quiere aprovecharse. Hay mucha cultura de aprovechamiento en Chile, del doblar en segunda fila, saltarse la fila en el supermercado, etc. Y esto un poco reflejo de eso, porque la gente que había invertido $ 40 millones, y le pagaban $ 2 millones mensuales, obviamente tienen que haber sabido que había algo raro. Pero se aprovecha la oportunidad, y la ambición los mata.
-Llama la atención que, habiendo controles medianamente similares, que funcionan en otros países, aquí algo falló.
-Sin duda. Y es peor aún, porque hubo varias alertas pero ninguna se atendió. Por ejemplo, la respuesta del intendente de Valores, quien dijo que vio (la información) en la página web, pero como eran operaciones en moneda extranjera, entonces no eran de su competencia. Eso, es insólito.
-Parece que este caso no es competencia de nadie
-Claro, aquí hubo demasiadas alertas, pero la gente que debió haber hecho algo no lo hizo.
-¿Falta de recursos?
-Al menos cuando estuve yo, nunca tuve reclamos por falta de recursos. Y creo que han seguido dotando de recursos a la UAF. Pero no me gustaría oír como respuesta, de ninguno de los que han sido mencionados que recibieron la información, que le echen la culpa a los recursos. En el fondo, se pavearon, no se dieron cuenta de qué había detrás de la información que les estaban entregando.
-¿Cuál es la solución?, ¿normar?
-Lo que ocurre es que uno puede tener muchas normas, pero si la gente no las cumple, de poco sirve. El fraude está penado hace mucho tiempo, entonces si hay una persona dispuesta a defraudar, y están los incautos...qué más se va a hacer. Probablemente necesitamos más educación, mayor divulgación...
Crece número de querellas ante tribunales por caso
Por Felipe Brión
La abogada Bárbara Salinas, hasta la tarde de ayer aún no había sido notificada, oficialmente, del desistimiento de la demanda interpuesta por un cliente en contra de IM Forex, por presunta estafa piramidal. Según trascendió, el querellante habría llegado a un acuerdo económico con los dueños de la firma para que quitara el recurso legal.
Para la profesional, el mensaje que esta dando IM Forex "es bastante erróneo", ya que, según comenta, lo que quiere decir es que quienes busquen recuperar sus fondos tendrán que acusar a la empresa. "Si ellos tuvieran la certeza y las pruebas para sostener que no es una estafa piramidal y que esto no es un fraude, no se explica que hayan tenido que llegar a un acuerdo económico para tratar de bajar esta querella", agrega. Pero este desistimiento no significa el fin de la investigación. La abogada asegura que con el retiro de la demanda "el único delito que desaparece es el estafa", pero aún se investigará, por parte del fiscal Carlos Gajardo, el incumplimiento de la Ley General de Bancos y el delito de asociación ilícita. "Además, nosotros ya tenemos ingresada y declarada admisible otra querella, sin considerar que tenemos muchos requerimientos de otras víctimas que se están acercando", añade Salinas, agregando que hasta la tarde del miércoles eran cerca de 50 personas las que se han acercado a ella.