El consejero delegado del Banco
Wachovia, Ken Thompson, ha dimitido de su cargo a petición del
Consejo de Administración de la cuarta entidad bancaria de Estados
Unidos, después de una sucesión de adquisiciones poco acertadas y
malos resultados financieros.
El Consejo de Administración de Wachovia informó hoy de que el
sustituto de Thompson será el presidente de ese órgano, Lanti Smith,
actual director general del banco Tippet Capital, hasta que se
designe a otra persona con carácter definitivo.
Esta dimisión forzada tiene lugar después de que Wachovia difundiera el mes pasado sus cuentas correspondientes al primer
trimestre del año, que reflejan unas pérdidas de US$ 708 millones, en parte debido al lastre que ha supuesto una dinámica
política de adquisiciones, algunas de ellas muy expuestas a la
crisis crediticia.
"No se trata de un único acontecimiento el que ha llevado al
Consejo a tomar esta decisión, sino una serie de contrariedades y
reveses que, acumulados, han tenido un efecto negativo en la
compañía y su funcionamiento", explicó Smith a través de un
comunicado.
Para el Consejo, "un nuevo liderazgo ayudará a revitalizar
Wachovia para desarrollar todo su potencial", añadió el nuevo
presidente de la entidad, quien consideró que la reciente captación
de capital lograda por el banco le da "la solidez financiera y
flexibilidad necesarias para un entorno que sigue siendo
extremadamente desafiante".
El actual vicepresidente y presidente de banca general del banco,
Ben Jenkins, será quien actúe como director financiero hasta que se
designe a otra persona para ocupar ese cargo de forma definitiva.
Las acciones de la compañía con sede en Charlotte, Carolina del
Norte, caían el 2,73% en las operaciones electrónicas que
tienen lugar antes de la apertura de la Bolsa de Nueva York, para
negociarse a US$ 23,1 cada una.
La salida del banco de Thompson recuerda a las de sus homólogos
en Citigroup, Charles Prince, y en Merrill Lynch, Stanley O'Neal,
que hace meses abandonaron sus cargos después de que sus respectivas
empresas se resintieran fuertemente de la crisis crediticia en
Estados Unidos.