El nuevo programa de compra de bonos del Banco de Inglaterra (BoE, su sigla en inglés) experimentó problemas en su segundo día de operaciones ayer, luego de que los fondos de pensiones y las compañías de seguro que luchan con la profundización de una crisis de financiamiento rechazaran vender títulos al banco central.
Inversionistas resistieron el intento del BoE de comprar 1.170 millones de libras en bonos gubernamentales de largo plazo a pesar de recibir precios significativamente por encima del mercado y ofrecieron vender sólo 1.120 millones de libras.
La semana pasada, el gobernador del BoE, Mark Carney, reveló un conjunto de medidas de expansión monetaria diseñadas para proteger a la economía de una recesión anticipada consecuencia del referendo del Reino Unido para abandonar la Unión Europea (UE). Eso sorprendió a los mercados financieros por su amplitud y condujo a un nuevo colapso en el rendimiento de los bonos.
El déficit de la subasta provocó una fuerte caída del rendimiento de la deuda mientras los inversionistas cuestionaban si el BoE encontrará suficientes vendedores para completar el reavivado esquema de alivio cuantitativo.
“El hecho de que su primer intento para comprar bonos de largo plazo haya fracasado plantea signos de interrogación importantes” dijo Mitu Patel, jefe de tasas de interés en Herderson Global Investors.
El BoE confía que futuras subastas serán cubiertas en su totalidad. Puntualizó que la brecha fue pequeña y que la negociación en los mercados es débil en agosto. Se tiene previsto que el banco publique un comunicado hoy.
Más problemas
Sin embargo, inversionistas dicen que el BoE probablemente enfrente el mismo problema en su próxima subasta a medida que los fondos de pensiones lidian con graves desajustes de financiamiento. “El Banco de Inglaterra se quedó 50 millones de libras corto en sus compras de bonos soberanos para hoy, e incluso entonces sólo aseguró esa cantidad al pagar muy por encima de los precios del mercado”, dijo Darren Bustin, jefe de derivados en Royal London Asset Management. “En pocas palabras, para alcanzar sus objetivos de alivio cuantitativo el banco puede tener que apuntar a los bonos menos valorados de los sistemas de pensiones”.
El rendimiento de la deuda de referencia a diez años ha caído desde un 2% a un mínimo histórico de 0,56% este año, provocando un déficit récord en el esquema de pensiones del Reino Unido que utiliza el rendimiento de los bonos para calcular sus pasivos. El déficit combinado de los 6.000 esquemas de pensiones privados del Reino Unido aumentó a un nuevo máximo de 408.000 millones de libras el mes pasado, de acuerdo al Fondo de Protección de Pensiones, desde los 383.600 millones en junio.
Antes de los anuncios de la semana pasada tras la reunión de política monetaria, varios comentaristas sugirieron que enfocar las nuevas compras de títulos en bonos soberanos con vencimientos a menores plazos podría ser beneficioso. Vender unos de mayor maduración y comprar otros más cortos sería el reverso de la “Operación Twist” de la Reserva Federal en 2011 y podría reducir el rendimiento en bonos de menor madurez.