El Estado británico controlará el 57,9%
de las acciones del Royal Bank of Scotland (RBS) después de que los
accionistas rechazaran invertir en los títulos ofrecidos por un
total de 15.000 millones de libras (unos US$22.727 millones).
Según informó hoy el banco, sólo una pequeña parte de esa
ampliación de capital fue comprada por los existentes accionistas ya
que los papeles salieron a la venta por encima del precio en el mercado bursátil. Apenas el 0,24% de los títulos fueron adquiridos por manos
privadas.
El RBS, propietario de NatWest, es junto con Lloyds TSB y HBOS
uno de los tres bancos británicos que el pasado mes de octubre se
acogieron al plan de rescate propuesto por el Ejecutivo de Londres
para hacer frente a la crisis financiera.
La compra por parte del Estado de este paquete accionarial
supondrá que las cuentas públicas sufragarán los 2.500 millones de
libras (unos US$31.778 millones)que se van a pagar de más por la compra de las acciones a un
precio un 18% más caro que el fijado por el mercado.
El director ejecutivo de la entidad financiera, Stephen Hester,
expresó su agradecimiento al gobierno por el rescate del banco.
"Lamentamos que los actuales accionistas no hicieran uso de sus
derechos preferenciales de compra, pero entendemos que el la
percepción de mercado hacia el sector bancario convirtieron esta
opción en poco rentable en el corto plazo", dijo Hester.
Según los términos de este plan de rescate aprobado hace una
semana por la junta de accionistas, el banco escocés, fundado en
1727, no podrá pagar dividendos hasta que recompre al Estado las
acciones preferentes, lo que se propone hacer para el 2010.
RBS va a ser el principal beneficiado del paquete de rescate
anunciado por el ejecutivo del primer ministro Gordon Brown por una
cantidad final de 37.000 millones de libras (cerca de US$47.031 millones).
Todo parece indicar que el Estado británico también tendrá un
fuerte presencia en Lloyds TSB y HBOS, de los que será propietario
aproximadamente en un 40%.