La mayoría de los analistas proyecta que la economía mundial tomará fuerza durante 2015, pero eso no significa que el Producto Interno Bruto global será mayor al ser medido en dólares.
Bank of America Merrill Lynch calcula que el PIB planetario se encogerá en US$ 2,29 billones (millones de millones) en este ejercicio. El descenso no es insignificante, ya que representa 3,2% del PIB estimado para 2014.
Para poner el dato en perspectiva, esta contracción sería como si un mercado como el de Brasil, Rusia o Italia simplemente desapareciera del mapa.
En su análisis, el banco consideró a Estados Unidos, la zona euro, Japón, el Reino Unido, Australia, Canadá y todos los mercados en desarrollo que cubren, entre ellos Asia emergente y América Latina. En conjunto, estas regiones sumaron US$ 70,9 billones el año pasado, lo que equivale a 91% del producto mundial medido por el Fondo Monetario Internacional.
La disminución hasta US$ 68,609 billones en el ejercicio actual se explicaría principalmente por el fortalecimiento del dólar y se produciría a pesar de que la expansión real global se aceleraría desde 3,3% a 3,5% en 2015.
"El número de bienes y servicios producidos aumentará a una tasa más rápida; es sólo que la mayoría de ellos van a ser producidos en países donde la divisa se ha debilitado frente el dólar, y continuarán debilitándose, según nuestro pronóstico", escribieron los economistas Marcos Buscaglia y Ana Madeira en el informe titulado "La pérdida de US$ 2,3 billones del PIB global".
La primera economía del mundo es la única nación y Asia emergente es la única región donde el PIB nominal en dólares se elevará durante este año.
Evento inusual
En tiempos normales, el PIB global nominal se incrementa considerablemente cada año. El crecimiento promedio de este indicador ha sido 6% desde 1981.
A partir de 2002, la expansión promedio subió a 6,6% gracias a la adhesión de China a la Organización Mundial de Comercio, el ritmo de crecimiento más rápido de los emergentes y la apreciación de sus monedas frente al dólar.
Los expertos explicaron que un declive en la economía mundial en términos nominales es "bastante inusual basándose en estándares históricos". El PIB global nominal se ha contraído sólo cinco veces desde 1981y en tres de esos años por menos de 1%.
Se han necesitado grandes eventos como la crisis de deuda de 1982 –cuando el PIB en dólares retrocedió 2,3%– y la Gran Recesión de 2008/2009 –cuando la cifra se encogió 4,6%– para generar una reducción similar a la que probablemente ocurrirá en 2015.
Implicancias del alza del dólar
La apreciación que ha mostrado la principal moneda del mundo en los últimos meses tiene importantes implicancias para la economía global, con el impacto sobre los precios de las materias primas siendo el más directo.
El petróleo, el cobre, el hierro y el azúcar han sido algunos de los commodities que se han visto golpeados por el mayor valor del dólar. Los analistas de BofA Merrill Lynch acotaron que el factor común que ha está presionando a la baja el costo de los recursos naturales es la política monetaria.
La expectativa de un alza en las tasas de interés de Estados Unidos por parte de la Reserva Federal fortalece la moneda local, lo que a su vez reduce el valor en dólares de las materias primas, incluso si el precio no cae cuando se mide en las divisas foráneas.
Esto "ya está funcionando, a medida que el dólar se está volviendo más fuerte en contra de las monedas de países y regiones que están expandiendo la política monetaria (Japón/Europa) y en contra de las monedas de los exportadores de commodities", como el peso chileno.
Buscaglia y Madeira puntualizaron que la correlación entre el crecimiento del PIB global nominal y el cambio anual en los precios del crudo y del cobre ha sido de 29% y 59%, respectivamente, desde 1981. En los últimos quince años, estas correlaciones avanzaron a 67% y 65%.
Una segunda implicancia de la fortaleza del dólar es que la economía estadounidense se volverá más importante de nuevo. Según las estimaciones del banco, la participación del país dentro de la economía mundial tocó un mínimo de 23,5% en 2011 y se ha mantenido cerca de ese nivel desde entonces. Los expertos esperan que la proporción ascienda a 27% del PIB global en 2016.
Vea una infografía con las todas las estimaciones aquí