La significativa revisión al alza del crecimiento de Alemania en 2014, publicada por la Oficina Federal de Estadísticas (Destatis) la semana pasada (que estuvo por encima de las expectativas nuestras y del mercado), provocará una revisión de nuestro pronóstico de crecimiento para 2015. Incluso mantener nuestra tasa de crecimiento proyectada de cerca de 0,4% por trimestre para este año, impulsaría el pronóstico para todo 2015 a cerca de 1,6% (desde el 1,2% actual).
A pesar de que la cifra del cuarto trimestre fue muy sólida, mantenemos la cautela, dada la fuerte dependencia de Alemania de la demanda externa (pese a que crecimiento del cuarto trimestre fue impulsado principalmente por la demanda doméstica).
Hay varias razones para esto. Primero, el crecimiento en Francia e Italia, los dos principales mercados de exportación para Alemania, sigue siendo débil.
Segundo, esperamos que la demanda de muchos mercados emergentes clave, otro importante motor del crecimiento de alemán, se mantenga apagada.
Finalmente, hay grandes fuentes de riesgo a la confianza desde dentro de Europa, en particular la crisis en Ucrania y las turbulencias políticas en partes del sur de Europa.
Una segunda estimación publicada por Destatis, mostró que el PIB real en el último trimestre de 2014 se aceleró significativamente, a 0,7% trimestre sobre trimestre (ajustado estacionalmente y por días laborales), desde 0,1% en los tres meses previos. Destatis también revisó al alza el crecimiento del PIB real para todo el año, a 1,6% de 1,4%, en su primera estimación de enero.
El crecimiento trimestral en octubre-diciembre alcanzó el nivel visto en los primeros tres meses de 2014, cuando la economía se expandió a una tasa similar.
En los seis meses intermedios, el crecimiento fue esencialmente plano, debido al golpe a la confianza por los acontecimientos en Ucrania, el intercambio de sanciones de la Unión Europea con Rusia y la débil demanda de la mayoría de los mercados de exportación claves.
Precios del petróleo
A pesar de Destatis no entregó un desglose completo del crecimiento en el cuarto trimestre, un breve comentario que acompañaba los datos entregados indicó que la demanda doméstica fue el principal motor del crecimiento en el período.
En parte, esto refleja una mejora en el poder de gasto de los consumidores, impulsado por los menores precios del petróleo. Sin embargo, los efectos de un euro más débil significan que en términos de moneda local el aporte fue menos significativo de lo que podría suponerse, al menos hasta diciembre (esperamos un fuerte impacto este año).
Es probable que haya sido más importante el crecimiento del empleo, que alcanzó un 0,9% en 2014, un alza desde 0,6%. Esto fue impulsado en gran medida por una fuerte inmigración neta, en su mayoría desde el sur de Europa, relacionada con las difíciles condiciones económicas en esa zona.
De acuerdo a la Eurostat, la tasa de desempleo alemana, ajustada estacionalmente, cayó a 4,8% en diciembre, su nivel más bajo desde 1991.
Positivo para 2015
Las implicancias para el crecimiento en 2015 son positivas. El crecimiento del cuatro trimestre elevó el nivel del PIB real hasta el punto de que, incluso si la economía no crece trimestralmente en todo 2015, crecerá en términos anuales en 0,5%.
Nuestras estimaciones iniciales sugieren que al mantener nuestras expectativas de una trayectoria de crecimiento de 0,4% por trimestre para 2015, la expansión del PIB real de todo el año alcanzará un 1,6%, en comparación con nuestro actual pronóstico de 1,2%.
Es evidente que hay más riesgos al alza, y lo revisaremos durante nuestra siguiente ronda de pronósticos. Nuestra estimación de que los precios del petróleo se mantendrán mucho más bajos por mucho más tiempo es claramente un gran impulso para el gasto de los consumidores.
Riesgos externos
Las señales de mejora en la economía han sido evidentes por algún tiempo, con los indicadores de confianza futura subiendo desde fines del tercer trimestre.
Sin embargo, aunque hay alguna variación en los indicadores, ninguno está cercano a los niveles de principios de 2014, lo que implica alguna razón para la cautela.
Más aún, usando el desglose del Índice de Gerentes de Compra (PMI, su sigla en inglés) de servicios y manufactura como un barómetro aproximado de la actividad doméstica (servicios) y externa (manufactura), hay claramente una ruptura significativa.
Pese a que el PMI de servicios se ha fortalecido en meses recientes, el indicador manufacturero permanece estancado cerca de un mínimo en varios trimestres.
Dada la inusualmente alta dependencia de Alemania de la demanda externa y la manufactura como un motor para el crecimiento y desarrollo, hay una preocupación, particularmente a la luz de la actual crisis en Ucrania (a pesar de la reciente firma de un alto el fuego) y las turbulencias políticas en el sur de Europa.
Actualmente Grecia domina los titulares, pero nosotros vemos a 2015 como un año de potenciales terremotos políticos para Europa, con España como una preocupación particular.
Dada la velocidad con la cual los problemas se traspasaron a la confianza doméstica en el segundo trimestre de 2014, haciendo que la economía se estancara, seguimos siendo cautos.