Dilma Rousseff supera prueba clave: Cámara Baja aprueba recorte del seguro de desempleo
La medida, que fue respaldada por estrecho margen, ayudaría a reducir el gasto público en US$ 6 mil millones, pero aún debe ser ratificada por el Senado.
- T+
- T-
Una medida que reduce el costo de las prestaciones sociales fue aprobada en la noche del miércoles por un estrecho margen en la Cámara Baja del Congreso de Brasil, una ajustada victoria para la presidenta Dilma Rousseff en medio de su campaña por reducir el déficit fiscal y restaurar la confianza de los inversionistas.
Los legisladores aprobaron por 252 votos a favor y 227 en contra el proyecto que endurece las condiciones para que los desempleados brasileños obtengan beneficios y seguros de desempleo, una ley que ha enfrentado a Rousseff con el mayor sindicato de Brasil y con algunos miembros de su propio partido, el Partido de los Trabajadores (PT).
De esta manera, todo trabajador que quede sin empleo por primera vez recibirá una asignación oficial siempre y cuando lleve contratado al menos doce meses, y no seis como hasta ahora.
La medida de ajuste se conoce en un momento crítico para Rousseff, cuya popularidad ha caído cuando la mayor economía de América Latina se encamina hacia una recesión y la petrolera estatal Petrobras ha sido golpeada por un fuerte escándalo de corrupción.
Los líderes del Partido de los Trabajadores finalmente convencieron a los miembros reacios del grupo para que votaran a favor de uno de los varios recortes al gasto propuestos por el ministro de Hacienda, Joaquim Levy, que busca cerrar la brecha del presupuesto.
"Es una victoria para toda la sociedad", subrayó Levy en Brasilia ayer.
El proyecto ahora espera la aprobación del Senado, donde podría enfrentar obstáculos ya que el presidente de la Cámara Alta, Renan Calheiros, ha criticado el impacto del programa de austeridad en los trabajadores, dijo a Bloomberg Rafael Cortez de la consultora Tendencias.
Superávit primario
Levy ha buscado aumentar los ingresos del gobierno de Brasil y reducir los gastos en un intento por alcanzar una meta de ahorro fiscal de 1,2% del Producto Interno Bruto (PIB) este año, revirtiendo así el déficit de 0,63% de 2014.
Brasil, que creció 0,1% el año pasado, se arriesga a perder su grado de inversión si no logra ordenar sus finanzas.
El proyecto de ley es la primera de las dos medidas clave para reducir las prestaciones de seguridad social que el equipo de Levy inicialmente previó que reducirían el gasto en 18 mil millones de reales (US$ 5.900 millones) en 2015. Sin embargo, la introducción de enmiendas durante su primera tramitación habrían reducido su efecto. El ministro de Presupuestos, Nelson Barbosa, estimó el miércoles que las dos iniciativas ahora permitirían ahorrar sólo 14.500 millones de reales.
Levy dijo la semana pasada que espera que la economía de Brasil se contraiga este año, pero confía en que el ajuste fiscal lleve a un renovado crecimiento en el futuro. Asimismo, indicó que el riesgo de que Brasil pierda su grado de inversión ha disminuido sustancialmente, y advirtió que las medidas de ahorro fiscal deben ser aprobadas para que el país mantenga su nota.
Protestan los sindicatos
Los principales sindicatos brasileños convocaron ayer una jornada de protestas para el próximo 29 de mayo contra los ajustes a la economía anunciados por el gobierno, así como contra un proyecto de ley de reforma laboral.
El movimiento fue convocado por un grupo de seis sindicatos, entre los que se encuentra la Central Única de Trabajadores (CUT), el mayor del país, vinculado al Partido de los Trabajadores de Rousseff.
Esta es la segunda protesta convocada por los sindicatos contra las políticas de austeridad y contra la ley de tercerización, que prevé la flexibilización de las normas para subcontratar a trabajadores, después de una jornada de manifestaciones que tuvo lugar el pasado 15 de marzo.
Según los sindicatos, la jornada de protestas es una "preparación" para una posible huelga general.