En el balance al cierre del ejercicio 2018, las tres principales empresas de telecomunicaciones registraron una caída generalizada en los ingresos globales de sus diferentes áreas de negocios.
En este escenario, Movistar registró una disminución de 4,8%, seguida de Entel con una baja de 2,18% y de Claro con un retroceso de 0,9%.
La principal causa de este resultado es caída en las ventas del negocio móvil, que en el caso de Movistar y Entel llegaron a niveles de 3,5% y 5%, respectivamente, en tanto Claro reportó un leve crecimiento de 0,3%.
Los analistas y expertos coincidieron en atribuir este retroceso a la fuerte competencia abierta en la telefonía móvil, con la arremetida de nuevos operadores y las agresivas campañas comerciales.
"La industria de telecomunicaciones continuaría marcada por una fuerte competencia, con un alto nivel de penetración tanto en Chile como en Perú, donde los ingresos por servicios de telefonía móvil se han ajustado significativamente tras la implementación de estrategias comerciales de mayores servicios y menores costos para los usuarios", señaló un informe de BCI Corredores.
En este escenario altamente competitivo, el consultor Roberto Gurovich, explica que hoy el foco de la industria está puesto en la venta de paquetes de datos lo que "mantiene los ingresos o, incluso, los reducen por fuerzas competitivas, pero van expandiendo el ancho de banda o el volumen de datos que pueden transar al mes". Esto se refleja, señala, en el peak de penetración de 132% sobre persona en servicios móviles.
De esta forma, indica el experto, los ingresos se ven afectados por esta compra de datos a menor escala y el incremento de las negociaciones directas en condiciones más convenientes para los clientes.
"Creo que es primera vez o una de las pocas, en que los ingresos de telecomunicaciones no van a la par del aumento del PIB, que históricamente ha sido una correlación bastante amplia; eso llama la atención", destaca Gurovich.
Pese a que la base de clientes neto a nivel nacional se ha expandido un 3% con 9.260.638 clientes, los expertos indican que se trata de un mercado "maduro", donde la fuerza de ataque recae en que las firmas puedan hacer ofertas agresivas para disputarse los abonados.
El analista del Grupo Consultor Regulación y Mercado, Cristián Rojas, sostiene que una mayor introducción de competencia en el mercado, con firmas como WOM llevó a que las compañías perciban "una baja en sus ingresos por otros actores que han ganado más market share".
Añade que un factor que explica este fenómeno es que no hay modelos colaborativos entre las empresas que puedan satisfacer la demanda en zonas de competencia en que la infraestructura no hace viable más de una red. "Por ejemplo en zonas en las que dos redes no se financian, pero una sí, no hay estímulos para que, al menos, un actor se despliegue", explica.
El escenario de las compañías
En su balance a diciembre pasado, Movistar informó que sus ingresos percibidos en el servicio móvil bajaron 15,3% en comparación al ejercicio 2017.
El reporte publicado ayer en la sede de Telefónica en Madrid, indicó que en el mercado chileno existe una tendencia general que afecta al segmento de prepago, donde ellos anotaron una reducción de 15%, retroceso que explicó por un ambiente de "intensidad competitiva".
Asimismo, en los últimos doce meses también bajó el desempeño del área de servicios fijos, donde los ingresos por voz y acceso son los más afectados con una baja del orden de 13,9%, seguido de la televisión de pago con 7,4%.
Movistar registró 11.591.500 clientes finales en 2018, un 5,2% menos que el año anterior, donde cerraron el ejercicio con 12.227.900.
Por su parte, Entel -firma ligada a las familias Hurtado y Matte-, señaló en su análisis razonado que la telefonía móvil tuvo una baja de 5,5% en los ingresos de los servicios variables, asociados al incremento de las cuotas de datos y de los minutos libre de voz ofrecidos en la evolución de la oferta comercial tanto en pospago como en prepago.
Al igual que Movistar, Entel coincide en que el segmento de prepago fue el más afectado, "por una reducción de las recargas por parte de los usuarios, la caída en los cargos de acceso y una mayor migración hacia planes de pospago".
Asimismo, explicó que uno de los segmentos fuertes de la compañía, el móvil empresarial, continuó enfrentando un mercado competitivo con agresivas promociones de datos y la reducción de líneas móviles para bajar los costos a los abonados.
En el caso de Claro, filial de la mexicana América Móvil, informó una mejora en su desempeño de 2018 en términos de sus resultados finales, con una reducción de sus pérdidas y una alza en el EBIDTA.
"En los últimos años, hemos potenciado la diversificación y crecimiento de otros negocios, como los fijos y empresariales y generado una mejor eficiencia operativa", indicó el director de Finanzas de Claro Chile, Federico Oguich.
En función de esta estrategia, el ejecutivo señaló que "nuestro EBITDA sigue al alza por cuatro años consecutivos, con un incremento de 23,1% respecto al año pasado, logrando una mejora de 16,2 % de nuestros resultados operacionales. En el negocio móvil, a nivel de servicios móviles, también logramos un alza de 0,3% en los ingresos, la que si bien es moderada, es acorde al entorno competitivo que vive el sector, por lo que estamos optimistas respecto a que la nueva estrategia de marca ha sido positiva, lo que se ve reflejado en el crecimiento de nuestra cartera de clientes pospago e internet hogar".