Sebastián Vega Morales
“El consumidor no es solamente quien te compra, es también quien te ayuda a crecer”, dice uno de los socios de la empresa que comercializa artículos de arte y decoración, y que busca su consolidación luego de un 2010 prometedor.
Tomás Correa Soza y Francisco Errázuriz Soza tienen en común algo más que su segundo apellido. Estos primos decidieron emprender en el rubro del arte el año 2010, justo después de un viaje a China e India que les sirvió para darse cuenta que importar y comercializar cuadros en Chile podía ser un excelente negocio.
Con el slogan “Inspírate, tú impones la tendencia”, ambos jóvenes levantaron Bandara Group., empresa que vende objetos de arte y decoración, con la firme idea de entregarle al cliente la posibilidad de armar un espacio propio, que refleje la personalidad del comprador a través de innovadores productos.
“Nosotros no te vamos a imponer una tendencia, no te vamos a decir qué comprar, sino que te vamos a ofrecer ciertos productos que a ti te lleven a decir ‘esto en mi casa se vería bien’” relata Tomás Correa, Gerente General de Bandara.
La firma comenzó en mayo del año pasado, luego de que los dueños probaran la efectividad del modelo con una compañía hermana a su emprendimiento, Zen Mobiliario, una iniciativa de Errázuriz que comercializa muebles de interior, terraza y oficina.
“Bandara no parte sola, empieza a partir de una prueba que dio resultado, Zen Mobiliario (…) ésta partió el 2008, más o menos en la misma fecha, y tuvo un crecimiento explosivo, lo mismo que pasó con Bandara, por eso te digo que son similares en sus mecánicas”, aclara Correa, quien también es publicista de la Universidad del Desarrollo.
Iniciar una sociedad tenía para estos jóvenes un sabor especial, pues ambos vislumbraban sus futuros ligados al mundo de los negocios. “Se me habían dado las condiciones en la vida para optar a otro tipo de oportunidades, y no estar comiéndome las oportunidades de otros, eso me llevó a emprender”, explica Tomás Correa.
El fundador de Bandara aclara que fue en su viaje a Asia donde hicieron “buenas migas” con uno de sus proveedores, negociaron de inmediato y resolvieron lanzarse con todo a la importación de cuadros y artículos ornamentales, una apuesta sustentada en el atractivo de sus diseños y los excelentes precios que obtuvieron de sus distribuidores.
“Nosotros sabíamos el producto que teníamos y que es totalmente distinto, un producto que llegaba a muy bajo precio nos permite llenar el espacio con algo interesante, tallados en madera, algo diferente que en Chile la gente está buscando”, sostiene.
Elemento diferenciador
La estrategia utilizada por Tomás Correa y Francisco Errázuriz para posicionar su marca fue canalizada a través de su participación en importantes ferias de arte y decoración.
“Estuvimos en Espacio Deco, Bazar ED y en algunas ferias más chicas, y siempre seguimos probando, era más que nada para hacer presencia y darse a conocer”, afirma Correa Soza, para luego narrar el punto de inflexión de su éxito.
“Llamamos a nuestro proveedor, hicimos un contrato con muchos puntos para que él nos apoyara en esto. Nos pagó el 50% del flete aéreo y trajimos 30 productos para darlos a conocer en la feria y, la verdad, fue lo mejor que pudimos haber hecho, porque el éxito fue rotundo, vendimos como el 80% de lo que trajimos”, comenta entusiasmado el gerente de Bandara al contar su experiencia en Espacio Deco.
El concepto diferenciador de este negocio parece ser una de las claves de sus buenos resultados, en especial por sus métodos de venta y la decisión de prescindir de un espacio físico para ofrecer sus artículos.
“No entregamos al cliente el costo de una tienda, que encarecería el producto, el servicio lo despachamos a domicilio, compras por internet y en el mismo showroom, tratamos de dar facilidades de pago”, comenta Correa.
En la actualidad, Bandara vende sus cuadros a todo Chile, cuenta con cuatro empleados y factura cerca de $ 25 millones al año, números que esperan superar con creces este 2011.
“Queremos consolidar la empresa, superar en un 25%-30% la venta del año anterior. Ahora estamos concentrados en llevar este negocio a un segundo plano, poder surtir a otras tiendas de diseño con productos, manteniendo nuestra marca y las condiciones (…) la idea es decir, si a ti te va bien, a nosotros también nos va bien”, enfatiza Tomás Correa.