Liquidación del grupo Bada atrae a inversionistas: SMU, Moneda y GSI Capital apuestan por exlocales de Montserrat
Al menos dos fondos estarían apostando por quedarse con los activos y otros se rematarán. La matriz de Unimarc ya tiene algunos en arriendo, pero ahora entraría a la propiedad.
- T+
- T-
La inminente liquidación de los activos inmobiliarios que pertenecían a las empresas Supermercados Montserrat e Inmobiliaria Santander (ISSA), negocios de la familia Bada, han despertado el apetito de una serie de inversionistas locales.
En 2022, frente a un complejo escenario financiero, ambas sociedades pidieron su reorganización judicial. Según los documentos que entregaron a la justicia, entre ambas compañías, los pasivos superaban los US$ 190 millones.
Un fondo de Moneda Asset, que contaría con SMU entre sus aportantes, se quedaría con una decena de los activos. Otro vehículo de inversión, de GSI Capital, también se anotaría con una docena de propiedades.
En ese proceso, los acreedores aprobaron un acuerdo que consideraba fusionar Montserrat e ISSA y luego proceder a la venta ordenada de todos los bienes inmuebles de estas sociedades, lo cual sería supervisado por el interventor de la causa, Enrique Ortiz D’Amico, y una comisión de acreedores.
Hoy, tras más de dos años, las transferencias de estos activos, bien valorados en el mercado financiero sobre todo por sus ubicaciones, están a punto de cerrarse. El negocio, eso sí, no ha estado exento de obstáculos, y entre los nuevos dueños, aparecerían nombres como SMU, Moneda Asset Management y GSI Capital.
El arbitraje de SMU
El mismo año 2022, SMU -matriz de Unimarc, Super10 y Alvi- cerró un contrato para arrendar 21 locales en los que operaba la cadena Montserrat. La firma ligada al empresario Álvaro Saieh, por efecto de esos contratos de arriendo, obtuvo una cláusula en la que se le garantizaba un “derecho a primera oferta” en el caso de que se decidiera vender los inmuebles.
En paralelo, como parte del acuerdo de reorganización, la administradora de fondos chilena controlada por la brasileña Patria, Moneda Asset Management, entregó financiamiento adicional al grupo Bada para viabilizar el proceso y cubrir, entre otras, obligaciones tributarias y laborales. Esto se realizó mediante un “crédito puente” de al menos UF 420.000 (más de US$ 16,5 millones), por el cual Moneda obtuvo garantías hipotecarias sobre algunas de las propiedades.
Estos compromisos entraron en tensión el 16 de mayo, cuando Montserrat envió una carta al gerente de Finanzas de SMU, Arturo Silva, donde le informó que había recibido “algunas ofertas formales” por 20 de los 21 locales que arrendaba. Entre las ofertas, por algunos de esos inmuebles, estaba Moneda, que pretendía utilizar los derechos de compra que había obtenido por el “crédito puente”.
Lo anterior hizo que, a fines de mayo, SMU ingresara una solicitud de arbitraje de emergencia a la CAM Santiago -a la cual tuvo acceso este medio-, en contra de Montserrat y los Bada, con la que consiguió una medida precautoria que le prohibió a estos cerrar cualquier contrato relativo a la transferencia o enajenación de los supermercados, reclamando que no se había respetado su derecho a realizar una primera oferta por ellos.
Los nuevos dueños
Sin embargo, tras ese impasse, las partes se habrían sentado a negociar. Según pudo confirmar DF con fuentes que participan de las conversaciones, mediante un fondo de inversión, Moneda estaría a punto de cerrar la compra de una parte de estos activos inmobiliarios. En ese fondo, SMU participaría como aportante.
Ya existiría un entendimiento total entre las partes, por lo que el negocio podría pactarse en los próximos días. El fondo se quedaría con alrededor de una decena de activos, por un monto entre US$ 30 millones y US$ 40 millones.
Los conocedores de estas negociaciones recalcan que nunca existió un conflicto entre Moneda y SMU, sino que solamente hubo interés por los mismos activos.
Y no son los únicos que están prontos a quedarse con un pedazo de los bienes a liquidarse. GSI Capital, la administradora de fondos de inversión especialista en activos alternativos, ligada a Nicolás Noguera y a la familia Ovalle, también está apostando por los exsupermercados Montserrat y uno de sus fondos se quedaría con otros 12 inmuebles de la familia Bada. Entre estos, también se incluyen algunos de los locales que SMU tiene arrendados.
Consultado Enrique Ortiz, el interventor de la reorganización de Montserrat, afirmó que están trabajando para que estas operaciones se encuentren perfeccionadas antes del 30 de noviembre de este año.
Respecto a las eventuales negociaciones con SMU, Ortiz sostuvo que estarían siendo llevadas directamente por los interesados en comprar los inmuebles y que esperan prontamente tener noticias al respecto.
Activos en remate
Vale decir que los exMontserrat están lejos de ser los únicos locales que detentaban los Bada y que, por ende, hoy se están liquidando. De hecho, el 8 de agosto, Tattersall rematará once inmuebles que forman parte de esta reorganización.
Entre ellos, se incluyen strip centers en La Florida y Puente Alto; supermercados en San Bernardo y Conchalí, y dos locales comerciales en Las Condes, además de otros terrenos industriales y/o comerciales.
Según avisos comerciales que ha publicado Tattersall, estas once propiedades, en su conjunto, se rematarán a un valor mínimo de UF 1,4 millón -sin incluir IVA-, esto es, unos US$ 55,7 millones.