La sociedad Gastronómica Fukai Limitada, ligada al chef Nicolás Rosen Bermúdez, solicitó a la justicia la apertura de un proceso de liquidación voluntaria. Sus pasivos superan los $ 1.500 millones y sus principales acreedores son los bancos Santander e Itaú, además de Plaza Vespucio SpA y la Tesorería General.
La empresa, asesorada por el Estudio Nelson Contador Abogados & Consultores, inició sus operaciones hace más de trece años a través de la cadena de comida asiática Fukai, para luego sumar los restaurantes Rosita, de comida mexicana. Llegó a tener ocho locales en emblemáticas ubicaciones, como Paseo El Mañío de Vitacura, Patio Bellavista y Boulevard Plaza Ñuñoa.
“Hasta septiembre de 2019, el negocio de Fukai crecía con dinamismo, su presencia se consolidaba poco a poco en el mercado gastronómico y sus locales reportaban un buen desempeño, siendo el local de Patio Bellavista el que registraba la mayor facturación del negocio. Sin embargo, el estallido social de octubre de 2019 afectó gravemente la operación de la compañía”, explicó a la justicia.
“Posteriormente, desde marzo de 2020, la pandemia por Covid-19 desestabilizó aún más el negocio de Fukai, toda vez que se decretaron períodos de confinamiento que impidieron la atención de locales”, añadió.
La compañía aseguró que los años siguientes a la pandemia también estuvieron marcados por una serie de factores adversos que mermaron su operación. “Fukai debió ajustar su caja a las nuevas regulaciones laborales, como el aumento del sueldo mínimo y la reducción de la jornada laboral, que en una empresa de menor tamaño generan un impacto relevante en las nóminas de pago”, dijo la firma, la cual destacó que está en un estado de cesación de pago insoslayable, ya que -dijo- carece de un flujo estable de fondos pagar sus obligaciones.
“La decisión de iniciar este proceso no fue tomada a la ligera, sino que fue objeto de una exhaustiva evaluación sobre su situación financiera y operacional. Es más, durante el año 2024 los accionistas otorgaron financiamiento y aportes adicionales a la compañía, por un total aproximado de $ 380 millones, con la esperanza de revertir el resultado deficitario, lo cual finalmente no ocurrió”, señaló la sociedad gastronómica.