Proyecto inmobiliario de Copec en Viña del Mar pide plazo adicional para responder dudas de servicios públicos
Iniciativa en Las Salinas contempla una inversión superior a los US$ 800 millones y está en pleno proceso de evaluación ambiental, respecto del saneamiento del terreno.
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El megaproyecto inmobiliario y comercial que busca levantar Copec en Las Salinas, Viña del Mar, que tendría un costo total superior a los US$ 800 millones, está intentando sortear con éxito su paso por el sistema ambiental.
A través de Inmobiliaria Las Salinas, la empresa ingresó en diciembre del año pasado –por tercera vez- un Estudio de Impacto Ambiental (EIA) con el fin de habilitar el paño de casi 17 hectáreas frente a la costa, para uso residencial y equipamiento.
Como parte de este proceso, la empresa solicitó más plazo para entregar la Adenda, documento preparado por el titular del proyecto que responde a las consultas del Informe Consolidado de Aclaraciones, Rectificaciones o Ampliaciones (Icsara), que consolida las consultas, aclaraciones o rectificaciones solicitadas por los servicios competentes que participan en el proceso.
La empresa tenía hasta el cinco de junio para presentar sus respuestas, pero tras la solicitud presentada a la autoridad, el plazo se extendió hasta el 18 de octubre de 2019.
Inmobiliaria Las Salinas fundamentó su petición para contar con un plazo mayor para efectuar y finalizar los estudios complementarios y modelaciones requeridas, particularmente aquellos que se derivan de las solicitudes de los servicios públicos relativos a los posibles efectos sobre la calidad del agua subterránea y al componente aire que el proyecto podría generar, “permitiendo así dar respuesta de manera apropiada a las consultas, observaciones y comentarios emitidos por la autoridad”, sostuvo la empresa.
Antecedentes técnicos
El objetivo de la filial de Copec es desarrollar un plan de descontaminación del terreno en Las Salinas -el que estuvo expuesto a combustibles por muchos años- a través de la técnica de biorremediación, que opera acelerando la acción de bacterias que degradan compuestos orgánicos como los hidrocarburos.
Este método, que costaría unos US$ 55 millones, implica un cambio significativo respecto al propuesto con anterioridad, que transportaba las arenas hace otros lugares.
La idea de Copec es poder habilitar el paño para todos los usos aprobados en el plan seccional de la comuna, esto quiere decir, residencial y equipamiento comercial. Actualmente, el terreno sólo permite área verde.
Como parte del Icsara, se solicitó a la empresa presentar los antecedentes técnicos que permitirían verificar que la excavación del suelo, hasta 0,5 metros bajo el nivel del agua subterránea, sería la condición adecuada y suficiente, desde el punto de vista hidrogeológico, para efectos de producir el impacto positivo que se espera con la ejecución del proyecto. En caso contrario, se solicita corregir dicha profundidad de remoción, según corresponda, pero siempre de manera fundada.
El intendente de Valparaíso, Jorge Martínez, en un pronunciamiento respaldado por el Consejo Regional, dijo que si bien el estudio señala que el método utilizado es un tratamiento que se realiza dentro del sitio (on-site), sin necesidad de transportar los suelos hacia un sitio de disposición final, también menciona que existe suelo que ha sido identificado con características de peligrosidad en el paño norte durante el plan de muestreo 2015-2016, el cual será enviado a disposición final a través de un tercero autorizado.
La autoridad regional insistió que no existe certeza respecto de la localización del sitio en el cual se efectuará la disposición final de los lixiviados, considerando que se trata de hidrocarburos y compuestos volátiles altamente tóxicos para la salud de las personas.
La Gobernación Marítima de Valparaíso también planteó sus dudas respecto al impacto de la obra en el borde costero. Dijo que el estudio no considera los sectores de playa y rompiente dentro del área de influencia del proyecto, sin embargo, dijo que en el Capítulo 3, se indica que existen evidencias de un cauce de agua subterránea continental descargando en el intermareal aledaño a la iniciativa.
“Teniendo presente lo anterior y la experiencia de afloraciones de aguas contaminadas con hidrocarburos en el sector de playa durante la construcción del proyecto Modulo de Equipamiento Turístico Playa Los Marineros Sur (aprobado en 2004), no es posible descartar completamente la posibilidad de existir una transferencia de contaminantes desde los suelos que se remediarán hacia las aguas subterráneas y a su vez al sector de playa y rompiente; por lo cual se solicita incorporar los sectores antes mencionados como parte del área de influencia del proyecto”, dijo el capitán de Navío, Juan Cecilio Gajardo.