UniCredit se suma a pares y evalúa abandonar operaciones rusas

UniCredit SpA está considerando salir de sus operaciones en Rusia como parte de una revisión urgente del negocio, lo que indica un retroceso financiero acelerado de la nación como consecuencia de la invasión de Ucrania.

"No se pueden sacar conclusiones de la noche a la mañana, pero pronto informaremos con más detalle", dijo el director ejecutivo, Andrea Orcel, en una conferencia organizada por Morgan Stanley el martes. "Obviamente, debemos considerar seriamente el impacto, las consecuencias y la complejidad de retirar un banco completo del país".

El banco con sede en Milán se une a una lista creciente de bancos europeos que comienzan o consideran seriamente retirarse de Rusia a raíz de la invasión de Ucrania, con Deutsche Bank AG dando marcha atrás y anunciando una retirada la semana pasada. UniCredit se encuentra entre los prestamistas europeos con mayor exposición a Rusia, junto con Raiffeisen Bank International AG de Austria y Société Générale SA de Francia.

UniCredit ya ha dicho que en un escenario extremo en el que se eliminen sus activos bancarios rusos, sufriría un impacto de unos 200 puntos básicos en sus reservas de capital, o unos 7.400 millones de euros (US$ 8.100 millones). Orcel confirmó el dividendo previsto por el banco para 2021.

Inversiones en Rusia

UniCredit anunció el año pasado que tiene la intención de devolver al menos 16.000 millones de euros a los accionistas para 2024, y Orcel ha impulsado cambios que incluyen una racionalización de la gestión y salidas de negocios no esenciales. El banco, el segundo más grande de Italia, ha dicho que está buscando fusiones y adquisiciones que aumenten el valor para los accionistas, pero se alejó de una posible adquisición del Otkritie Bank FC de Rusia en enero cuando se multiplicaron las señales de conflicto en la región.

Los préstamos a clientes de la unidad rusa de UniCredit ascendieron a 7.800 millones de euros (US$ 8.600 millones) a finales de diciembre, mientras que la exposición transfronteriza a clientes rusos es de unos 4.500 millones de euros. Orcel sostuvo que ante la situación el banco no invertiría "ni un centavo más" en el país.